Vic

La fachada de la Pasión de la Sagrada Familia estará lista en dos años

La fachada de la Pasión de la Sagrada Familia de Barcelona se prevé que esté lista en entre un año y medio y dos años.

La fachada de la Pasión de la Sagrada Familia de Barcelona se prevé que esté lista en entre un año y medio y dos años.

Además, se proyecta la posibilidad de que incluya el monumento que Antoni Gaudí proyectó para homenajear al obispo catalán y amigo personal Josep Torras i Bages.

Así lo ha anunciado este viernes el director y coordinador de las obras de la Sagrada Familia desde 1985 hasta 2012 y actualmente director emérito y coordinador del templo expiatorio, Jordi Bonet, en el marco de la jornada de clausura del I Congreso Internacional Antoni Gaudí, celebrado en la Universitat de Barcelona con un centenar de expertos mundiales.

El proyecto monumental de 20 metros, que incluye un busto de Torras i Bages y se basa en tres patas correspondientes a las virtudes teologales --fe, esperanza y caridad--, se basa en el minucioso estudio llevado a cabo por Bonet, gracias a la copia de uno de los dibujos del arquitecto catalán, que se perdieron con la quema del estudio de Gaudí el 20 de julio de 1936.

Gaudí proyectó este homenaje a Torras i Bages dentro de la basílica, conmovido tras la lectura de la última carta pastoral ‘La ciència del patir’ ultimada por el obispo de Vic (Barcelona) pocos días antes de su muerte.

Durante los últimos meses, Bonet ha estudiado la proporción del proyecto, y ha constatado que éste sigue las leyes geométricas típicas gaudinianas, con proporciones de 7,5 metros, 7,5 metros y 3,75 metros, o bien cinco veces 3,75.

“La crisis no afecta a la Sagrada Familia desde el punto de vista económico”, ha dicho Bonet, lo que hace pensar que el proyecto monumental podría estar listo con el final de las obras de la fachada de la Pasión, lo que coincidiría con el centenario de la muerte de Torras i Bages en 2016.

Bonet ha aprovechado el congreso para mostrar la última imagen que se tiene del arquitecto catalán que, fechada en 1925, es fruto de una película inédita filmada en el Monasterio de Monterrat y donde se ve un Gaudí “sonriente”, ha destacado el arquitecto, que no ha desvelado el origen del filme del que él tomó una instantánea hace menos de diez años.

Hasta tres personas cercanas a Gaudí le han confirmado la identidad del arquitecto, tratándose de la monja que acudía a limpiar la casa de Gaudí, la hija de los porteros de la Sagrada Familia y un académico cercano al mismo arquitecto.

El director del Archivo Diocesano de Barcelona, de la Biblioteca Pública Episcopal y del Museo Diocesano de Barcelona, Josep Maria Martí Bonet, se ha mostrado como un converso de Gaudí: “No me gustaba nada y ahora soy adicto”, ha bromeado.

Martí Bonet ha reivindicado la “fama de santo” del considerado ‘arquitecto de Dios’ y ‘poeta de la piedra’, y ha remarcado que tanto si finalmente se canoniza a Gaudí como si no, todo el proceso habrá servido para profundizar en su vida y obra.

El rector de la UB, Dídac Ramírez, ha cerrado el congreso que ha estrechado los vínculos de Gaudí con la universidad, donde cursó los estudios de Arquitectura, y que con este congreso salda una deuda con el arquitecto tan vinculado a la marca Barcelona.