¿Los niños vienen de París?

El trío vocal femenino Les Cot presenta en la sala Barts un dinámico y vitalista «road trip» musical.

La amistad tiene una de esas caras de viejo gruñón que de repente se ríe y queda tierno y ridículo y esencial. El amor, en cambio, tiene una de esas caras de ángel de cabellos lacios que de repente, a lo «El resplandor» se arruga y te da un susto de muerte. Por ello, los personajes más interesantes de todas las comedias románticas son los amigos de los protagonistas. Lo demás sólo es el comienzo de una película de terror.

La amistad es la gran protagonista de uno de los musicales sorpresa surgidos de este arranque de año. ¿Cantar a la amistad? Claro, pero también al sexo, al arrepentimientos, al deseo de redención, a los sueños, a todo eso que se comparte con un amigo. Porque todas las canciones que no hablan de amor es que no saben de lo que hablan, pero si el amor no es la parte fundamental de la amistad es que no es amistad ni es nada.

La sala Barts, dentro del primer festival de teatro independiente Festie, acoge hasta el 6 de enero la comedia musical «París», creada y protagonizada por el trío vocal femenino Les Cot. Con música original compuesta y orquestrada por Óscar Peñarroya, y dirección escénica de Paul Berrondo, la obra es una «road movie» sin moverse del teatro, en que tres amigas hablarán, cantarán y desnudarán sus almas hasta descubrir que a veces no es necesario ir a ninguna parte para encontrar lo que buscas porque en realidad ya lo tienes.

El argumento es en apariencia sencillo. Tres amigas salen en coche de Barcelona en dirección a París. Una de ellas quiere ser madre de una maldita vez y quiere encontrar a su «semental» en la capital del amor. Mientras, sus dos amigas se verán obligadas a acompañarlas por una promesa de infancia, no sin antes intentar de disuadirla de las formas más increíbles. El trayecto las obligará a reevaluar su vida, obligándolas a superar sus miedos y superar sus cadáveres en el armario.

Las protagonistas de esta inusual y enérgica pieza, llena de imaginación y realismo mágico son Elia Corral, Mar Maestu y María Viñas. Las tres unen sus voces para fusionar el vigor, la varidad y la emoción de un concierto con la acción y la empatía de las obras de teatro.