Exposición

Tras la sombra de Brossa

La obra del poeta visual inspira una instalación de CaboSanRoque en Arts Santa Mònica.

Una mirada diferente. Una imagen de la instalación «No em va fer Joan Brossa» que ha realizado Cabosanroque.
Una mirada diferente. Una imagen de la instalación «No em va fer Joan Brossa» que ha realizado Cabosanroque.larazon

La obra del poeta visual inspira una instalación de CaboSanRoque en Arts Santa Mònica.

La riqueza de la obra de Joan Brossa, ya sea desde una perspectiva visual o escrita, es un terreno fértil para inspirar a todo tipo de creadores. Y eso pasa si se sigue toda su producción, desde sus primeros títulos, como «Em va fer Joan Brossa», un poemario publicado por Cobalto en 1951. Su particular imaginario sin concesiones, su mirada desde el grupo artístico Dau al Set hace que todavía su sombra sea alargada y que deba ser tenido en cuenta por cualquier creador que piense creativamente en una vanguardia.

Tapones de botellas de agua que vibran sobre cucharas, bolitas que caen en vasos de cristal creando músicas y palabras que suenan vaciadas de su significado conforman «No em va fer Joan Brossa», una instalación creada por el dúo de artistas CaboSanRoque que se podrá ver en el Centre Arts Santa Mònica a partir de hoy.

La obra es una interpretación libre que CaboSanRoque ha construido como destilación de la obra de Joan Brossa, según explicó ayer la componente de CaboSanRoque Laia Torrents.

«Todo empezó con el meta-collage que hicimos en el Centre Arts Santa Mònica y donde varias personas nos dijeron que nuestro juego con los objetos era muy brossiano», añadió Torrents.

«Luego llegó el encargo de hacer algo relacionado con la obra de Brossa y, tras la alegría inicial, vino el vértigo, porque el universo de Brossa es enorme y no sabíamos por dónde acercarnos. Finalmente, hemos optado por elaborar nuestra propia propuesta, por eso la obra se llama “No em va fer Joan Brossa”», aclaró Laia Torrents.

El punto de partida de este proyecto artístico es la prosa que el poeta barcelonés desarrolló entre los años 40 y 50, tratada de manera que el sonido de la palabra es más importante que su significado.

Los objetos entran en la instalación descontextualizados, como en la obra de Joan Brossa, y crean sonidos, músicas e imágenes «demasiado diversos y contradictorios para ser reducidos a un sólo significado», señalaron los dos miembros de CaboSanRoque.

«La experiencia no puede ser medida con el conocimiento racional», dijo este dúo de artistas sonoros formado por Laia Torrents y Roger Aixut, que apelan a nuestra percepción sensorial a través de un trabajo milimétrico de ingeniería mecánica.

En la instalación podemos encontrar algunas de las pasiones y recurrentes en Brossa, como la vitalidad musical de Richard Wagner en la apertura de «Parsifal», pasando por el transformismo de Frègoli, aunque aplicado al objeto y a la aliteración de objetos comunes que se van transformando en diferentes paisajes.

Cabosanroque es un dúo de artistas sonoros que iniciaron su andadura como colectivo musical en 2001. Son constructores de sonidos que aplican a diferentes ámbitos como instalaciones sonoras, artes escénicas o músicas, además de trabajar siempre con el sonido, las capacidades expresivas de la máquina y sus posibilidades para vehicular todo tipo de emociones.

Dónde: Arts Santa Mònica. Claustre Max Cahner.

Cuándo: Hasta el 18 de marzo.