Emili Altur dice haber demostrado que sus asesores trabajan para él

El vicepresidente de la Diputación de Valencia, Emili Altur (Compromís), salió ayer del acuartelamiento de Patraix convencido de haber demostrado que sus asesores trabajan para él.

Tras las citaciones a declarar cursadas por la Guardia Civil la semana pasa tanto a Altur como a Pérez Garijo (EU), José Manuel Orengo (PSPV) y Jesús Pardos (PSPV), trascendió que el origen de las sospechas beneméritas era la contratación de asesores a sueldo de Imelsa y que podrían estar trabajando no en la empresa pública, ni siquiera en la Diputación, sino en las correspondientes sedes de los partidos políticos a los que pertenecen los investigados, lo que supondría un delito de malversación.

Altur explicó que los agentes le habían preguntado «un poco de todo» pero que habían centrado las pesquisas en los asesores. El diputado de Compromís explicó que mediante correos electrónicos y otros documentos había demostrado que sus trabajadores realmente trabajaban para él y no en otros menesteres. «Hemos aportado contratos de trabajo y correos que acreditan que esas personas están trabajando, en este caso conmigo».

Altur, al igual que pasó el día anterior con Garijo, Orengo y Pardos, no fue remitido al juez para que prestara declaración, aunque ello no significa que esto pueda ocurrir en cualquier momento.

El interrogatorio de Altur es lógico pensar que fue similar al que se le hizo a la diputada de Esquerra Unida, Pérez Garijo, si bien ella prefirió no dar explicaciones sobre este asunto «porque la Guardia Civil me ha recordado que el sumario es secreto».

Por otra parte, el titular del Juzgado de Instrucción número 18 de Valencia ya ha tomado declaración a dieciocho personas en calidad de investigadas (imputadas) en el marco de las diligencias por el caso Imelsa, seis de las cuales comparecieron por citación directa de la Guardia Civil, además de los cincuenta de la pieza separada del blanqueo que se da ya por cerrada.