Cataluña

La unidad de España, línea roja del PP para posibles pactos tras las elecciones

Margallo subraya que la sustitución de Rajoy como candidato «está fuera de toda cuestión»

De izda. a dcha., José Manuel García-Margallo, Elena Bastidas y Miguel Barrachina
De izda. a dcha., José Manuel García-Margallo, Elena Bastidas y Miguel Barrachinalarazon

La unidad de España es algo innegociable para el PP. Así de claro lo dejó ayer el ministro de Asuntos Exteriores y número uno del PP por Alicante, José Manuel García- Margallo. Esta es una de las líneas rojas infranqueables en el caso de que su partido se viera obligado a pactar tras las elecciones del próximo domingo. Otro de los puntos sensibles es la «igualdad de derechos y deberes», por lo que nunca llegarán a acuerdos con quien «quiera federalismos asimétricos, es decir, ventajas de unas comunidades frente a otras».

Margallo se pronunció en estos términos durante el desayuno del Fórum Europa, en el que estuvo acompañado por la número uno del PP por Valencia, Elena Bastidas, y su homólogo por Castellón, Miguel Barrachina.

Bastidas se mostró muy preocupada también por el debate territorial con Cataluña que, a su juicio, en la Comunitat se vive de manera distinta a otras autonomías. «En el norte tenemos a los que nos consideran parte de la entelequia de los ‘paisos catalanes’ y dentro de la Comunitat muchos estarían encantados de serlo», lamentó.

Alertó asimismo de que, por primera vez, «el nacionalismo ha llegado al Gobierno de la Comunitat» y recordó que en el pacto entre Compromís, partido en el Consell, y Podemos, de cara a los comicios del domingo, se incluye un referéndum vinculante para Cataluña.

La corrupción es otro de los asuntos que preocupa a la que fuera alcaldesa de Alzira, una lacra con la que hay que acabar, de la misma forma que con la violencia de género.

Reconoció que en la Comunitat ha habido «casos graves» de corrupción por los que han tenido que pedir perdón y que han tenido un coste electoral, pero añadió que en algunos casos «han pagado justos por pecadores».

Por su parte, Barrachina quiso recordar que ha sido el Gobierno del PP el que ha salvado el sistema de pensiones y añadió que España no se puede permitir volver a una izquierda que «ha arruinado» el país las dos veces que ha gobernado.

La presidenta del PPCV, Isabel Bonig, presentó a los tres candidatos como personas «tremendamente honradas, trabajadores incansables y de fuertes convicciones». Con respecto al debate entre Pedro Sánchez y Mariano Rajoy, aseguró que Sánchez ha llevado al PSOE al «desquicio, la marginalidad y la radicalidad».