Valencia

Montón reclama 260 millones de euros a las concesionarias y estas dicen que no les recibe

Ribera Salud intenta desde hace 18 meses reunirse con la consellera para hablar de este asunto

Montón, ayer durante su comparecencia en Les Corts Valencianes para explicar los presupuestos de su Departamento
Montón, ayer durante su comparecencia en Les Corts Valencianes para explicar los presupuestos de su Departamentolarazon

Ribera Salud intenta desde hace 18 meses reunirse con la consellera para hablar de este asunto

La consellera de Sanidad, Carmen Montón, reclamó ayer a las empresas concesionarias de los departamentos de salud de Elche, Dénia y Manises 260 millones de euros por liquidaciones pendientes a la Generalitat. Una acusación que no sentó nada bien a las señaladas como morosas.

Según Montón, en la actualidad están pendientes las liquidaciones de Elche-Crevillent desde 2010 y de Dénia y de Manises desde 2009, que arrojan un saldo a favor de la Administración de más de 260 millones, que por falta de gestión «rigurosa» están en manos de la empresa privada y no en los presupuestos de la Generalitat.

Sin embargo, Ribera Salud, firma concesionaria de los hospitales de Dénia y Alzira, entre otros, criticó que desde hace 18 meses está pendiente de una reunión con la Conselleria de Sanidad para tratar el tema de las liquidaciones a la Generalitat, y denunció que se han incumplido los plazos que marca el contrato.

«Por parte de Ribera Salud tenemos el máximo interés en que este procedimiento se haga en el tiempo y forma que marca el contrato, que establece que dichas liquidaciones se realizarán en el mes de marzo», destacaron ayer fuentes de la empresa.

Asimismo, aseguraron que los plazos que marca el contrato de concesión no se han incumplido «por voluntad de Ribera Salud», y matizó que los datos mencionados por Montón se refieren a todas las concesiones sanitarias, incluyendo las de otros operadores sanitarios.

Por ello, no pueden «confirmar ni desmentir la cifra» hasta que tengan la oportunidad de «poner en común la información de ambas partes, concesionaria y Administración, tal y como establece el contrato».

Sin embargo, la consellera dejó claro que tiene intención de cobrar esta deuda «en nombre de los valencianos». Es más, declaró que la gestión del PP sobre las concesiones administrativas «se puede calificar tranquilamente de negligente y de falta de control y de fiscalización», pues cuando el nuevo equipo llegó a la Conselleria se encontró por ejemplo con tres concesionarias que nunca habían aprobado liquidaciones.

Así se pronunció durante su comparecencia en comisión de Les Corts para explicar las cuentas de su Departamento para el año que viene, que ascienden a 6.084 millones de euros -un tres por ciento más que este ejercicio- y representan el 34,4 por ciento del total del presupuesto autonómico.