Política

Comunitat Valenciana

Puig se amarra al Botànic ante unos socios que le piden más presión a Sánchez

Descarta el adelanto electoral y da prioridad a la estabilidad del Consell para acabar los proyectos iniciados

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, entró al hemiciclo junto a la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra/ KIKE TABERNER
El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, entró al hemiciclo junto a la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra/ KIKE TABERNERlarazon

Descarta el adelanto electoral y da prioridad a la estabilidad del Consell para acabar los proyectos iniciados

Ya habrá tiempo en campaña electoral para diferenciar proyectos políticos. De momento, el Botànic sigue vivo y coleando, al menos hasta la próxima convocatoria electoral.

El Debate de Política General celebrado ayer en Les Corts se convirtió en una reivindicación del pacto que desalojó al PP de las instituciones. «El espíritu del Botànic no tiene limitación temporal, ni tan solo una limitación electoral», enfatizó el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, en los primeros minutos de un discurso en el que defendió los logros conseguidos y anunció unas cuantas nuevas propuestas que tienen un horizonte temporal limitado, los ocho meses que quedan hasta la convocatoria de elecciones.

El presidente se pronunció con más claridad que nunca sobre este asunto en las que no le ha importado jugar a la ambigüedad. Lo hacía ante la petición de la síndica del PP, Isabel Bonig, de adelantar elecciones. «Si lo hago, le daría un buen susto», dijo él ante los únicos aplausos de los socialistas.

El jefe del Consell ponía así como testigo a todo el hemiciclo de que su intención es agotar la legislatura. Admitió que la Comunitat Valenciana debe acabar separándose del resto de autonomías de la convocatoria general para «singularizar» este proceso, pero por encima de este deseo y que implicaría adelantar los comicios previstos para mayo, está la «estabilidad de un Gobierno que quiere acabar con lo que ha comenzado».

También habló de financiación autonómica y resaltó que desde que el Gobierno de España está en manos del PSOE se ha abierto un nuevo escenario de diálogo que se ha materializado en una serie de medidas transitorias que mejoran, pero no solucionan, la situación de los valencianos. Fue en este punto cuando el presidente anunció que se reunirá con el presidente Pedro Sánchez la primera semana de octubre.

Al resto de partidos le supo a poco esta defensa de la financiación. Todos coincidieron en la necesidad de reivindicar con mayor contundencia el cambio de modelo al Ejecutivo central.

La tradición parlamentaria marca que el Debate de Política General sirva para recoger las principales novedades que pondrá en marcha el Consell. Puig combinó el repaso a lo ya ejecutado con las próximas acciones de Gobierno.

El presidente hizo especial hincapié en aquellas que tienen que ver con la economía y avanzó proyectos en los que es necesaria la colaboración de la Generalitat con grandes empresas como Iberdrola, Telefónica o Indra.

En este sentido, y tal y como le han pedido los empresarios en incontables ocasiones, rompió las barreras impuestas por la exconsellera de Sanidad, Carmen Montón, a la sanidad privada y avanzó que se cerrará un plan de choque para acabar con las listas de espera, un problema no resuelto que abordará con un «Acuerdo Integral».

Además, se comprometió a que la Generalitat trabajará activamente para romper la «burbuja del alquiler».

La Conselleria de Vivienda tendrá preparado para antes de que finalice el año un índice de precios del alquiler y beneficiará con desgravaciones fiscales a los propietarios que no superen el máximo establecido.

Medidas

En materia económica anunció la creación de un Distrito Digital como «cluster» de la nueva economía; un plan de atracción de empresas; el impulso de la segunda fase de Parc Sagunt y un Pacto por la Industria Valenciana.

En materia social se aprobará la segunda edición de Avalem Joves; se dará beneficios fiscales a los propietarios que alquilen sus pisos por debajo de un precio máximo tasado por la Generalitat; becas para los opositores; un banco de ADN público para las víctimas de la Guerra Civil y la Dictadura y una tarjeta cultural que subvencionará la compra de bienes culturales.

En sanidad se firmará un acuerdo para acabar con las listas de espera activando el plan de choque mediante conciertos con hospitales privados y más autoconciertos; acelerar el proceso del área de salud de Dénia