Política

Iñaki Zaragüeta

¿SI GANA SÁNCHEZ GRACIAS AL PP?

El Partido Popular podría abstenerse, algunos aseguran que se abstendrá, en favor de la investidura de Pedro Sánchez, para que con el apoyo de Ciudadanos (Cs) éste acceda a la Presidencia del Gobierno en segunda votación en el Congreso de Diputados

La Razón
La RazónLa Razón

El Partido Popular podría abstenerse, algunos aseguran que se abstendrá, en favor de la investidura de Pedro Sánchez, para que con el apoyo de Ciudadanos (Cs) éste acceda a la Presidencia del Gobierno en segunda votación en el Congreso de Diputados

El Partido Popular podría abstenerse, algunos aseguran que se abstendrá, en favor de la investidura de Pedro Sánchez, para que con el apoyo de Ciudadanos (Cs) éste acceda a la Presidencia del Gobierno en segunda votación en el Congreso de Diputados. Una escena idéntica, pero por pasiva, a la que se vivió en 2016 cuando el PSOE se abstuvo para que Mariano Rajoy fuera proclamado presidente con el apoyo de Cs.

Así se tiene previsto en determinados círculos de poder, según me traslada mi amigo Rogelio, si el resultado de las generales presentan la disyuntiva de que Pedro Sánchez pueda prorrogar su estancia en la Moncloa por dos vía de coalición: el apoyo del partido de Albert Rivera o el de Podemos y demás socios de la izquierda radical, separatistas y los proetarras de Bildu.

En caso de darse este escenario, a pesar de que tanto Cs como Pablo Casado hoy no lo tuvieran previsto, los dos recibirán un acoso, quizá insalvable, por parte de ese instrumento conocido como «poderes fácticos» para impedir un Gobierno de PSOE, Podemos, Esquerra Republicana de Cataluña, Bildu, PNV y demás formaciones poco de fiar para el futuro de España. Eso, desde luego, es fácil de comprender. «Recuerda, dice mi amigo, la influencia que puede poner en práctica el Ibex 35 al que tanto deben los naranjas».

En aquella ocasión de 2016, Sánchez dimitió para no votar a Rajoy y es bien sabido el éxito obtenido. ¿Haría lo mismo Casado en esa situación? ¿tendría las mismas consecuencias que las recibidas por Sánchez? Dos preguntas difíciles de responder. En cualquier caso, quedaría demostrado aquello de «la venganza es dulce y no engorda». Así es la vida.