Día 1 de la batalla por Cibeles

Aunque desde Génova se intente frenar la onda expansiva generada por el «bombazo» de la salida de Ana Botella de la carrera electoral, en Madrid ya ha sonado el pistoletazo de salida para los aspirantes al puesto que la alcadesa dejará libre en mayo de 2015.

Aunque desde Génova se intente frenar la onda expansiva generada por el «bombazo» de la salida de Ana Botella de la carrera electoral, en Madrid ya ha sonado el pistoletazo de salida para los aspirantes al puesto que la alcadesa dejará libre en mayo de 2015. Se insiste en que queda mucho tiempo –la ley da de plazo hasta abril– para elegir a los candidatos para las elecciones municipales y autonómicas e incluso aseguran que el anuncio de la alcaldesa no va a acelerar la sucesión, que todos dejan en manos del presidente. Sin embargo, a nadie en el PP de Madrid se le escapa que aunque Mariano Rajoy no es amigo del «exhibicionismo político», en algún momento y de alguna manera los aspirantes han de postularse si quieren estar en la carrera. Además apuntan que la retirada de Botella no va a acallar las quinielas; al revés, las va a reavivar. Y eso sí que podría acelerar la designación de los cabezas de cartel de 2015.

Desde el partido se tantean nombres «locales» y otros que van más allá de Madrid. El objetivo es que tengan el tirón suficiente para asegurar la mayoría absoluta necesaria para que el PP no pierda la plaza más cotizada de los comicios municipales de 2015, un requisito que las quinielas acotan a dos nombres: Esperanza Aguirre y Cristina Cifuentes. El principio, según los estatutos, el PP de Madrid (que controla Aguirre y en el que está presente Cifuentes) es quien propone las candidaturas; y es el Comité Electoral Nacional quien los designa. Es decir, quien tendría la última palabra. Para los populares regionales es importante conocer los nombres cuanto antes. Así lo ha repetido la presidenta Aguirre en innumerables ocasiones, ya que considera necesario comenzar ya la campaña e imprescindible saber quiénes serán los candidatos al menos antes del mes de noviembre. La jefa del PP en Madrid explica que los expertos aseguran que el voto se decide seis meses antes de los comicios.

Sabedoras de que con toda probabilidad Rajoy decidirá en los próximos meses (la mayoría apunta a que antes de que llegue 2015) quiénes defenderán las siglas en la Comunidad y el Ayuntamiento, la presidenta del PP en Madrid y la delegada del Gobierno en la Comunidad estuvieron ayer al quite de la salida de Botella.

Aguirre comenzaba su valoración de los hechos el mismo martes por la noche, unas horas después del anuncio de Botella, en «La Brújula» de Onda Cero. La jefa del PP en Madrid, que insiste en su retirada de la primera línea política, sí que quiso valorar que la decisión de designar candidato sólo depende del Comité Electoral del PP y que «hoy en día, como lo fue entonces con Aznar, el dedo de Rajoy es el Comité Electoral».

Concedió tres entrevistas radiofónicas a lo largo de todo el día pero algunas de ellas, como la de Cadena Ser, ya estaban pactadas desde el lunes para explicar la decisión del juez sobre el incidente de tráfico que tuvo en abril. Aguirre atendió a las radios en los ratos libres que sacó en su trabajo en Seeliger y Conde. Así, desde su despacho en la agencia de cazatalentos volvió a recordar a su partido en la Cadena Ser, que la decisión de presentarse candidato a la Alcaldía depende de ellos y no de ella. Posteriormente, entró en directo en Radio Nacional y allí añadió que «Rajoy no le ha ofrecido a nadie ser candidato». Ya por la tarde, desde Génova, entró en esRadio donde se mostró partidaria de «que se escoja al mejor» y donde puso una nota de «notable» a la gestión de la alcaldesa.

El otro nombre presente en toda quiniela, y que ayer también quiso valorar la salida de Botella, fue el de Cristina Cifuentes. La delegada del Gobierno abogó en «Espejo Público» de Antena 3 porque se elija a un candidato «ganador» y «con posibilidades reales de vencer». Y sobre la salida de Ana Botella de la carrera por la Alcaldía más allá de mayo de 2015, aseguró que más que la encuestas, lo que «manda» es el sentido común. Y añadió: «Sería absurdo que el PP quisiera presentar a alguien que no tuviera posibilidades reales de ganar las elecciones». Cifuentes protagonizó uno de los momentos más comentados al tardar varios segundos en contestar cuando le pidieron poner nota a la gestión de la alcaldesa: «No soy quién para poner una nota».