Adif

La luz al final del túnel de Pío XII

Adif inicia las obras de rehabilitación del tubo norte para reparar los daños provocados por las filtraciones de agua.

El tubo norte del túnel de Pío XII está cerrado desde enero
El tubo norte del túnel de Pío XII está cerrado desde enerolarazon

Adif inicia las obras de rehabilitación del tubo norte para reparar los daños provocados por las filtraciones de agua.

Después de más de seis meses de cierre, el tubo norte del túnel de Pío XII ya tiene fecha, aproximada, de apertura. Según explicó ayer la empresa pública Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF), ya se han iniciado las obras que permitirán reparar las filtraciones de agua y los elementos afectados por la misma que obligaron a su cierre el pasado 8 de enero. Las obras, que supondrán una inversión de 3,8 millones de euros, tienen un plazo de ejecución de tres meses, por lo que estarán terminadas antes de otoño.

La rehabilitación del tubo norte de la vía subterránea comprenderá diferentes tratamientos que evitarán las filtraciones y permitirán reparar los elementos afectados por el agua en un tramo que discurre bajo algunas vías de la estación de Chamartín y que, según detalló ADIF en una nota, «se apoyan sobre una estructura metálica vinculada al túnel». Asimismo, desde la empresa pública señalaron que se han planificado las obras con «el propósito de minimizar las afecciones al tráfico ferroviario en la estación de Chamartín, en coordinación con la operadora».

El de Pío XII era el último túnel que quedaba por «desbloquear» después de la crisis de los subterráneos que se desató a finales del pasado año debido a las lluvias torrenciales. Las filtraciones de agua provocaron el cierre sucesivo y, en ocasiones, simultáneo de hasta 8 subterráneos a la vez, produciendo graves afecciones al tráfico. El consistorio madrileño culpó de los atascos a la concesionaria de los túneles, Dragados, por deficiencias en el mantenimiento de estas infraestructuras y determinó el «secuestro temporal» del contrato de concesión del mantenimiento de las mismas para poder subsanar cuanto antes el problema, amén de sancionar a la empresa por incumplimiento del mismo.

La constructora contraatacó y mediante recurso judicial logró que se paralizase el «secuestro temporal» puesto que, según recogieron los tribunales, dicha decisión afectaba a la libertad empresa y podría causar perjuicios al interés general. Finalmente, en marzo el consistorio y Dragados volvieron a estar en buenos términos y se inició la reapertura de los túneles –comenzando con el de Plaza de Castilla y el de Sor Ángela de la Cruz y el tubo sur del túnel de Pío XII–, así como las reparaciones de los problemas de filtraciones de agua.

Sin embargo, en el caso del tubo norte del subterráneo de Pío XII, la constructora se limitó a eliminar placas del techo, puesto que en el lateral afectaban a las instalaciones de Adif. De hecho, la empresa pública realizó una inspección exhaustiva de la estructura metálica que da soporte a la playa de vías de la estación de Chamartín, para estudiar el tratamiento de protección contra la corrosión que habría que darle a las vigas metálicas que las soportan. Adif ha trabajado en colaboración con técnicos municipales para determinar la solución óptima para rehabilitar la infraestructura.