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Madrid Central

Las desventuras de un electricista en Madrid Central

Óscar Mansilla tiene que cargar con todo el material de trabajo por el riesgo de robo que conlleva dejar la furgoneta rotulada en un parking.

Óscar Mansilla carga con todas las herramientas por el riesgo de dejarlas en la furgoneta en el aparcamiento disuasorio / Foto: Gonzalo Pérez
Óscar Mansilla carga con todas las herramientas por el riesgo de dejarlas en la furgoneta en el aparcamiento disuasorio / Foto: Gonzalo Pérezlarazon

Óscar Mansilla tiene que cargar con todo el material de trabajo por el riesgo de robo que conlleva dejar la furgoneta rotulada en un párking.

A Óscar Mansilla le empezaron a temblar las piernas el día que el Ayuntamiento de Madrid anunció la fecha de inicio del área de circulación restringida de Madrid Central. Es electricista, trabaja en la reforma de casas y locales, muchas de ellas dentro de las 472 hectáreas que ocupa la nueva zona en la que los coches que no sean eco o híbridos tienen muy complicado el paso. Su principal problema, y el de muchos vecinos y trabajadores de la zona, es la falta de información. «Apenas nos han explicado cómo vamos a poder trabajar dentro del área, sólo sabemos que tenemos que dejar nuestro coche en un párking». Como pudo comprobar hace unas semanas, con esta obligación empieza el problema.

«Decidí dejarlo en uno disuasorio, que para las furgonetas de trabajo como las nuestras, es un claro reclamo a los ladrones», afirma. Y es que ésta es otra de las reivindicaciones de la Plataforma de Afectados por Madrid Central, ya que el Consistorio exige a los autónomos que lleven los vehículos rotulados. «Imagina lo que le puede ocurrir a un vehículo que lleve el cartel de “Compro Oro”», pone como ejemplo Pascual Medel, portavoz de la Plataforma y de la Asociación de Comerciantes de Las Letras. Es por este motivo por el que Óscar, ante la posibilidad de que al volver se encontrara una sorpresa indeseada, decidió llevarse todo el equipo. «En mi trabajo no solemos cargar con todo el material y herramientas de golpe, ya que en las reformas todo estorba, se mancha y se estropea», explica. ¿La solución? «Nos toca hacer varios kilómetros diarios o te arriesgas a que se estropee todo», pero con la introducción de Madrid Central ésta ya no es una opción válida.

Ahora, «vacío toda la furgoneta y cargo con todo, hasta dejarla vacía, por si acaso», explica. En su último trabajo, «unos 900 metros separaban el párking donde dejé la furgoneta y la casa donde tenía que trabajar. Además, era cuesta arriba», recuerda. Como se puede ver en la imagen, Óscar utiliza un carro para transportar todo y «algunas de las maletas me las he tenido que comprar específicamente para Madrid Central, ya que me imaginaba que iba a tener este tipo de problemas». Así estuvo durante cuatro días, «por suerte», añade, ya que era la reforma de una vivienda y no se demoró. Sin embargo, «acostumbro a hacer tiendas pequeñas de alimentación, que tienen una duración de mes y medio, dos meses. Y en estos casos acudo a las tiendas cada día. Estoy cruzando los dedos a ver cómo me manejo», afirma.

La suerte de Óscar es que no siempre trabaja por el mismo área, «pero hay compañeros que sí y lo tienen muy complicado». Y es que este electricista tiene una cosa muy clara: «El profesional que resida en la zona se quedará con todo el trabajo de su distrito, ya que los que nos tenemos que desplazar desde fuera tenemos unos gastos extra con los que él no cuenta». Y esto será un obstáculo para muchos profesionales, así como temen que se pueda crear algún tipo de monopolio. «Aún encareciendo sus trabajos, serán más económicos. Ganarán más y trabajarán más. Todo lo opuesto a los que no somos del distrito», insiste.

Aún no ha llegado ninguna multa, pero, previsiblemente, a partir del próximo mes, el Ayuntamiento empezará a sancionar. Hasta el momento, los que cruzan el centro de Madrid pueden recibir una nota informativa informándoles de que alguna de las cámaras colocadas en el perímetro les han detectado. Sin embargo, lo siguiente serán las multas económicas. Supuestamente, como se afirma desde el Ayuntamiento, si el madrileño entra en la zona para aparcar en uno de los párking, no recibirá ninguna multa, sin embargo «los paneles que indican el número de plazas de cada uno de ellos, no están ni se les espera», insisten desde la Plataforma. Ellos creen que, finalmente, no se van a colocar, aunque la Administración aseveró, con la puesta en marcha del área restringida, que en mayo se colocarían. Mientras, los aparcamientos siguen perdiendo. «Hemos reducido la ocupación más de un 20%», asegura Joaquín José Puldáin, portavoz de AMEGA (Asociación Madrileña de Empresarios de Garajes y Talleres).