Guardia Civil
Cae una banda que desguazaba coches con destino Polonia
Tras robarlos, los desmontaban y fundían los chasis en la Cañada. Hay ocho detenidos
Tras robarlos, los desmontaban y fundían los chasis en la Cañada. Hay ocho detenidos
Ya conocíamos a bandas delincuenciales que desguazaban vehículos para venderlos por piezas. Hasta ahora, solían colocarlos en Marruecos, pero es la primera vez que la Guardia Civil (el Grupo de Investigación y Análisis de Tráfico del Sector de Madrid) desmantela una de estas bandas que «trabajaba» para Polonia. De hecho, la empresa de transportes era polaca y los agentes pillaron el camión cargado de piezas rumbo a este país. Se trata de una operación del instituto armado que comezó gracias a la Unidad de Investigación y Coordinación Judicial de la Policía Municipal de Madrid. Ellos dieron la voz de alarma en septiembre al observar la entrada de vehículos de alta gama a la Cañada Real. La organización apenas tardaba una hora en desmontarlos y quemar los chasis. Para ello tenían una estructura perfectamente establecida y cada uno de sus miembros se dedicaba a una función concreta. Unos se encargaban de robar los vehículos (sobre todo se han recuperado restos de Seat y BMW), otros, con expertos en mecánica, separaban las piezas y otros destruían los chasis en una chatarrería próxima a la zona de despiece. Así el vehículo desaparecía totalmente y ellos no dejaban huellas.
Los ocho arrestados (ha sido en varias fases, los últimos la semana pasada)por esta operación eran unos auténticos profesionales. Tras hacerse con un vehículo estaban todos preparados en sus puestos para desguazarlo de forma urgente. Así, lo llevaban al sector 6 de la Cañada y en una nave que hacía las veces de taller desmontaban todo en menos de dos horas. Tras ver el trasiego de vehículos hacia este punto de la Cañada y ante la sospecha de que pudieran ser robados los agentes municipales se pusieron en contacto con la Guardia Civil.Las primeras vigilancias que se realizaron en la zona permitieron descubrir que los restos desguazados los metían en cajas de un camión frigirífico con matrícula de Polonia, con destino a ese país.
Una vez identificados los ocho integrantes de la banda–seis españoles y dos polacos–, se procedió a su detención. La única mujer integrante del grupo regentaba una chatarrería donde fundían los restos. El cabecilla de la organización, de origen polaco, se encargaba de la distribución de los restos de los vehículos sustraídos, utilizando los servicios de una empresa de transportes polaca que realizaba el traslado de las piezas con documentos falsos. Además, junto a otro integrante de la misma nacionalidad, encargado de sustraer los vehículos, garantizaba la entrada segura de los vehículos y posteriormente se encargaba de supervisar el despiece de los automóviles así como del embalado de las piezas.
En el registro efectuado se localizó un vehículo sustraído que acababan de introducir y que en apenas 45 minutos habían semidespiezado. También se han recuperado piezas correspondientes a un total de 19 vehículos, todos ellos robados en las provincias de Madrid y Toledo. La operación continúa abierta, imputándoseles, hasta el momento, los delitos de robo de vehículo, falsedad documental, receptación y pertenencia a grupo criminal. Tras pasar a disposición judicial, el juez ha decreatado para los arrestados libertad con cargos.
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