Política

Contaminación ambiental

«Runner», no salga por la mañana a correr en Madrid

La zona de Paseo de la Castellana, una de las más transitadas por los corredores, no es recomendable por su cercanía con los vehículos. Foto: ANUSKA SANDRONI
La zona de Paseo de la Castellana, una de las más transitadas por los corredores, no es recomendable por su cercanía con los vehículos. Foto: ANUSKA SANDRONIlarazon

Retiro y Casa de Campo son las mejores zonas para correr, mientras que la Castellana y la avenida Pablo Iglesias son las menos saludables. Es preferible calzarse las deportivas a mediodía o por la tarde/noche.

Madrid es, sin duda, una de las ciudades favoritas de los corredores. Tanto es así, que por la coincidencia con las elecciones nacionales, la maratón se tuvo que cambiar de día. Cada año se celebran más de 400 carreras en la capital.

La fiebre del «running» lleva varios años instalada en la ciudad y no es raro encontrar a corredores a todas horas practicando este deporte. Sin embargo, ¿es saludable ponerse las deportivas a cualquier hora del día?

Zurich Seguros y RACC han realizado el primer estudio que analiza la calidad del aire y esta práctica deportiva en Madrid. Ha analizado el impacto de la contaminación en las personas que corren al aire libre. Con este análisis, los madrileños podrán saber cuáles son las mejores zonas para correr, así como a qué hora es más saludable. Dentro de la misma ciudad, las diferencias son significativas.

Para evaluar la calidad del aire, el estudio ha medido la presencia de los elementos contaminantes más frecuentes en las ciudades y que más afectan a la salud: el dióxido de nitrógeno (NO2) y las partículas en suspensión (PM2,5 y PM10), aunque no han incluido el ozono. Las mediciones se han realizado en cuatro puntos muy frecuentados por corredores y con aparatos específicos. Los datos se tomaron en días laborables y festivos, así como en distintas franjas horarias y en ausencia de lluvia y viento. Entre las principales conclusiones destaca el mediodía como la mejor franja horaria en las zonas con tráfico y para las zonas con menos congestión el mejor momento es la tarde/noche.

Así, en la capital se han analizado cuatro zonas: el parque de El Retiro, la Casa de Campo, el paseo de la Castellana y la avenida Pablo Iglesias. Según indica el estudio, el primero es el mejor lugar para practicar deporte, sobre todo a mediodía y por la tarde de lunes a viernes, mientras en días festivos es bueno acudir a cualquier hora.

Si usted es un corredor tardío, y le gusta salir a última hora de la tarde, la Casa de Campo es el mejor lugar. Sin embargo, las zonas menos óptimas para practicar este deporte son el Paseo de la Castellana, por el elevado tráfico motorizado que soporta y la avenida de Pablo Iglesias, cuyo volumen de contaminantes es bastante elevado por la gran cantidad de vehículos que la recorren. Si opta por esta vía, lo mejor es que acuda en días festivos o a la hora de comer.

«Durante los festivos, el mejor lugar es la Casa de Campo, mientras que la avenida Pablo Iglesias sigue siendo la menos recomendable», explica Marc Figuls, coordinador de estudios de la Fundación Racc.

Lo cierto es que los contaminantes que aspiran todos los madrileños se incrementan entre los corredores, ya que sus respiraciones se multiplican. «Los cuatro contaminantes que se suelen medir para analizar la calidad del aire aumentan los síntomas en enfermos respiratorios crónicos como los que sufren Epoc o asma. Lo notan especialmente los días posteriores a picos de contaminación», explica Isabel Urrutia, coordinadora de enfermedades respiratorias de origen Medio Ambiental de la Separ (Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica). Es importante dejar claro que «la polución es un causante más de varias enfermedades respiratorias. Puede desencadenar asma», añade la neumóloga.

A estas dolencias crónicas se deben añadir otras relacionadas directamente con respirar aire contaminado. «Produce un aumento de las infecciones respiratorias, disminuye la capacidad pulmonar en niños, produce más muertes al nacimiento, así como bajo peso al nacer y baja capacidad pulmonar. También puede producir embolia pulmonar y parece que aumenta las posibilidades de padecer cáncer de pulmón», sostiene Urrutia.

En lo que respecta específicamente a los corredores, «al respirar más rápido, meten más aire en el aparato respiratorio y, aunque la nariz hace efecto filtrado, con estos ritmos, tragan más polución». Y aunque estén sanos, «muchos de ellos llegan a casa con sensación de presión en el pecho por haber estado muy cerca de los tubos de escape». Y es que durante un entrenamiento, la inhalación de aire se puede multiplicar por cuarenta, como indican los responsables del estudio.

Así, cualquier persona que esté expuesta a la polución, «puede tener la traquea más irritada, los catarros tardan más en curarse... Es más fácil que los ciudadanos puedan coger más infecciones», añade la experta.

En lo que sí que insisten los creadores del estudio es que «los resultados obtenidos no reflejan valores que impidan realizar una actividad física, pero sí que se han encontrado diferencias interesantes en relación a la presencia de contaminantes, lo que puede ayudar a decidir dónde y cuándo salir a hacer ''running''», indicó Figuls. También han animado a alejarse de la calzada o de las fuentes emisoras de contaminantes, ya que distanciarse un metro puede reducir un 15 por ciento la exposición y practicar deporte en vías sin tráfico puede reducir un 60 por ciento la exposición a los agentes nocivos.

En el estudio se recomienda a las diferentes administraciones públicas la creación de una red más extensa de puntos de medición de la calidad del aire, la difusión de la información sobre esta materia en tiempo real a través de aplicaciones, así como la unificación de los criterios para evaluar la calidad del aire, ya que han comprobado que los límites que marca cada urbe es diferente. Asimismo, instan a habilitar itinerarios específicos protegidos con barreras vegetales o alejados del tráfico para peatones, ciclistas o corredores en los centros urbanos donde hay una elevada circulación de vehículos a motor.