El Betis del otoño pasado

El equipo de Setién confirma su crisis, pues ha sumado uno de los doce últimos puntos, en un partido loco en el que dejó ir una ventaja de dos goles y empató al final

Marcó por fin el Betis, nada menos que tres goles, pero eso no le sirvió para reencontrarse con la victoria. El acierto arriba apareció, incluso la inspiración, y también aparecieron a cambio los regalos en defensa del primer tramo de la pasada campaña, cuando los partidos eran una locura vistosa, todo lo que se quiera, pero nada eficaz.

Quique Setién, sabedor de la importancia del partido, puso en liza a lo más parecido a un once titular que tiene, acaso faltaría el aún renqueante Joaquín. El mensaje fue captado por sus pupilos desde el arranque, cuando pusieron sus ojos en la portería de Sergio. Había toque por momentos insulso, como siempre, pero de vez en cuando sonaba la estampida e iban todos en busca del gol. Canales lo rozó en los primeros minutos coin una chilena muy plástica y más cerca todavía estuvo al cuarto de hora, cuando el guardameta gallego repelió un disparo de Lo Celso, servido por un primoroso taconazo de Loren, y el santanderino atropelló el balón en vez de empujarlo hacia la puerta vacía.

También el Celta asustaba, pues no es equipo que desprecie la presión alta, con algunos robos de balón en zona comprometida que terminaron con disparos de Brais Méndes y Emre Mor bien detenidos por Pau López. Había cierto runrún en la grada, debido a las tres derrotas consecutivas, pero el tono del encuentro era más vivo. Arrepentidos los quiere Dios y así huyó el Betis del magreo mortecino de jornadas anteriores. Había chispa y el incendio podía declararse en cualquier momento.

En la primera media hora, el peligro se repartió casi por igual en las dos áreas, momento en el que aconteció uno de esos sucesos que cambian el curso de la historia. Okay marcó a la salida de un córner pero el linier intervenía para denunciar su fuera de juego. Debió despistarse Juncá, el lateral zurdo vigués, mientras el VAR confirmaba la decisión del asistente y ahí nació un golazo en cuatro toques, puro fútbol directo. Apertura de Pau López digna de Koeman, control orientado de Francis para galopar treinta metros y pase a Lo Celso, quien habilita con la espuela a Loren, en un calco de la jugada del comienzo. Con la diferencia, sustancial, que el marbellí pica con maestría a la salida de Sergio. Una obra de arte.

Mor desperdició un mano a mano con un disparo al muñeco en la primera acción de la segunda mitad, unos minutos que anunciaron emociones fuertes. Una acometida de Guardado, cuya presencia dota de calidad y adrenalina al centro del campo de su equipo, terminó con el balón en Júnior, que marcaba con un suave toque de interior y llevaba el delirio a la grada, que se pensaba a salvo de sustos pese a lo mucho que quedaba. Las emociones más fuertes se reservaron para la media hora final.

Maxi Gómez, nada más salir, marcó en su primer balón para acortar distancias y llevar la locura a la banda y al césped. Se embarcó el Betis en una batalla a contraestilo, pues quiso matar el encuentro con triquiñuelas del «otro fútbol», y le salió mal. Como un mazazo inesperado, llegó el empate de Brais Méndez, que todo el mundo veía venir excepto el banquillo local, desde donde no se movía pieza a pesar de que el Betis se estaba desangrando. Cuando Maxi Gómez hizo el 2-3, un conato de bronca general estalló. Menos mal que Canales, con un golazo espléndido de falta, arañó n punto que pudo volar en la jugada siguiente, ya que Iago Aspas reventó la cruceta con otro tiro libre magistral.

3 - Betis: Pau López; Bartra, Mandi, Sidnei (Tello, m.85); Francis (Joaquín, m.80), William Carvalho, Guardado, Lo Celso, Junior; Canales y Loren (Sanabria, m.80).

3 - Celta: Sergio Álvarez; Hugo Mallo, Roncaglia, Cabral, Juncá; Beltrán, Okay, Brais Méndez (Araujo, m.90); Emre Mor (Maxi Gómez, m.61); Boufal (Hjulsager, m.46) e Iago Aspas.

Goles: 1-0, M.33: Loren. 2-0, M.57: Junior. 2-1, M.63: Maxi Gómez. 2-2, m.69: Brais Méndez. 2-3, M.84: Maxi Gómez. 3-3, M.87: Canales.

Árbitro: Xavier Estrada Fernández (Comité Catalán). Expulsó al entrenador del Celta, Antonio Mohamed (m.70), por protestar, y también a los preparadores físicos de ambos equipos, en el 64, por un enfrentamiento entre ellos en la banda. Además, amonestó a los visitantes Juncá (m.62) y Okay (m.82), y a los locales Joaquín (m.64, en el banquillo), Canales (m.68), Junior (m.72) y Mandi (m.78).

Incidencias: Partido de la undécima jornada de la Liga disputado en el estadio Benito Villamarín ante unos 42.000 espectadores. Antes del encuentro se guardó un minuto de silencio en memoria de Ángel Iglesias ‘Machicha’, que fue jugador del Betis en la temporada 1970-71 y que falleció el pasado 24 de octubre.