Así es la espectacular mansión que Shaquille O’Neal ha vendido por “solo” 11 millones

A Shaquille Rashaun O’Neal los aficionados al baloncesto le quitamos su segundo nombre de pila para entronarlo a ese lugar que solo habitan los jugadores más dominadores de la historia de ese maravilloso deporte. Poseedor de cuatro anillos de la NBA, tres consecutivos con Los Ángeles Lakers cuando languidecía el pasado siglo y comenzaba el actual y uno más con Miami Heat en 2006, comenzó su prometedora carrera como jugador profesional en los Magic de Orlando, después de ser elegido en el número 1 del draft de 1992.

Con parte de sus primeras ganancias, Shaquille adquirió una espectacular residencia a las afueras de la ciudad de Florida, que es la protagonista absoluta de estas líneas. La adquirió por 3,95 millones de dólares en 1993 y hace cuatro años decidió ponerla en venta. Sus pretensiones, 28 millones, resultaron ser altamente excesivas para cualquier comprador, y así tuvo que ir, bajando, bajando, hasta que la firma Sotheby’s International Realty acaba de conseguir su venta definitiva. El precio final, “solo” 11 millones de dólares.

“Esta propiedad única en su tipo fue diseñada para uno de los jugadores más dominantes en la historia de la NBA. Cada detalle exquisito ha sido respetado para brindar la mejor experiencia de una vida de lujo”, aseguraba Danial Natoli, el comercializador exclusivo de la propiedad.

La mansión está situada dentro de la comunidad privada de golf de Isleworth, con unas fantásticas vistas hacia el lago Butler y cuenta con 1,6 hectáreas de terreno. En él se ubica una fantástica residencia con 12 habitaciones y 13 baños, pero también bodega, estudio de grabación (Shaquille también protagonizó una más o menos exitosa carrera musical), una increíble cancha de baloncesto certificada por la NBA decorada con los colores de los Miami Heat, un cine personalizado y un garaje con capacidad para 17 automóviles que, en su día, cuando el jugador residía allí, estaba permanentemente ocupa por una flota de lo más lujosa.

También posee un comedor con capacidad para 16 personas y una gran sala de dos pisos completada con una chimenea de mármol y paredes de vidrio.

Pero, como diría el otro, no se vayan todavía, que aún más. Todavía falta la joya la considerada joya de la corona de la mansión, un portentoso acuario decorado y ambientado con jeroglíficos y una piscina de 29 metros de largo, conocida desde tiempos inmemoriales como Shaq-apulco.

En total, la mansión, que estéticamente podría cumplir con los requisitos de la conocida como arquitectura mediterránea, cuenta con una extensión cercana a los 2.000 metros cuadrados.