La Fortuna, un barrio levantado contra sus okupas

No era la primera vez que los vecinos del barrio de La Fortuna de Leganés salían a la calle para reclamar la atención que le niegan las instituciones. Sin embargo, a una degradación que parece cronificarse se le suma ahora la inseguridad de la zona. Los robos y las agresiones se han multiplicado en las últimas semanas. ¿El motivo? Los vecinos señalan directamente a los okupas que se han instalado en varios edificios del barrio y que han hecho de la delincuencia su modus vivendi. De ahí que esta semana hayan protagonizado una protesta para gritar de forma unánime «basta».

Tal y como informaba el pasado miércoles el portal Leganews, decenas de residentes, tras celebrar una asamblea vecinal en el parque Serafín Díaz Antón, se dirigieron a algunas de las casas «okupadas» al grito de «¡fuera! ¡fuera!». Hasta el lugar se personaron cinco furgones de la Policía Nacional, si bien la protesta se produjo sin lamentar incidentes.

Según señalan varios vecinos a LA RAZÓN, se trata de varios inmuebles en las calles Fátima, San Felipe y Carmen. El Consistorio aclaró ayer que las casas señaladas corresponden en su mayor parte al antiguo Instituto de la Vivienda de Madrid (Ivima). Uno de los residentes, que vive «tapia con tapia» con los okupas y que pide preservar su anonimato, relata a este diario la situación. «Lo comenzamos a sufrir desde hace dos años. Ahora mismo están en cuatro o cinco edificios. ‘‘Enganchan’' la luz directamente de la calle, no tienen agua, van a una fuente cercana a un colegio donde cogen unos 300 litros, y su porquería nos llega a nosotros. Arman escándalo; el otro día se juntaron entre 30 y 40 para celebrar un cumpleaños. Ya ni siquiera llamamos a la Policía. Cada vez que lo hacemos, vienen, los okupas paran y, en cuanto los agentes se van, vuelven a empezar», afirma este vecino. Sin embargo, lo peor de todo es la inseguridad. «Se dedican a vender droga. Y cada vez hay más robos y tirones. No puedes ni llevar una cadena de oro en el cuello. Y si ven un bolso, el tirón está asegurado. La pasada noche también robaron el móvil a unos chicos...», enumera.

Si bien desde el grupo municipal de Vox había alertado en redes sociales de que los agresores eran menores extranjeros no acompañados –los conocidos como «menas»–, lo cierto es que este vecino señala que «hay de todo: algunos son españoles y otros son de fuera». En todo caso, y tal como recoge Leganews, algunos de los residentes sí que afirman haber sufrido robos por parte de menores. Así ocurrió con un joven de 20 años, al que un menor propinó varios puñetazos y patadas, y le arrancó el crucifijo que llevaba colgado al cuello, un regalo familiar. En esta ocasión, las autoridades detuvieron al agresor. Vox señala que están siendo los propios vecinos los que se «organizan en asambleas para defenderse».

Desde el Grupo Municipal del PP señalan a este diario que el Ayuntamiento de Leganés, gobernado por el PSOE y Más Madrid-Leganemos, mantiene ochenta vacantes abiertas en la Policía Municipal. «Ahora mismo no hay agentes en la calle para mantener la seguridad», señalan.

A raíz de estas informaciones, el alcalde de la localidad, el socialista Santiago Llorente, anunció que la Policía local y el Cuerpo Nacional de Policía intensificarán su presencia en el barrio de La Fortuna. De hecho, avanzó que habrá «agentes de paisano» vigilando la zona y que varios de estos okupas ya han sido identificados.

Con todo, el regidor avisó a los vecinos de que la Policía no permitirá nuevas manifestaciones como la del pasado miércoles por motivos de seguridad «sanitaria», ante la situación generada por el coronavirus. Del mismo modo, Llorente advirtió de los peligros que supone atribuir delitos sin pruebas, razón por la cual pidió que se deje actuar a las autoridades. Por último subrayó que en La Fortuna no hay mayor número de delitos que en otros barrios.