Madrid impulsa una nueva Ley de Farmacia que incluye la “entrega informada a domicilio”

El Gobierno de la Comunidad de Madrid, a través de la Consejería de Sanidad, trabaja en el Anteproyecto de Ley de Farmacias, que confía en que pueda remitir “lo antes posible” a la Asamblea de Madrid para su aprobación definitiva.

Así lo ha expuesto el titular del ramo, Enrique Ruiz Escudero, en la Sesión de Control el Pleno de la Asamblea de Madrid, donde ha subrayado que con ella buscan “establecer un nuevo marco regulador de la ordenación y atención farmacéutica”.

Con esa normativa, quieren que se determine líneas estratégicas de la planificación farmacéutica, que se subsane las distorsiones detectadas con el transcurso del tiempo consolidando un modelo accesible a la ciudadanía, y que se garantice, de igual forma, el acceso de los profesionales farmacéuticos a la apertura de oficinas.

La novedad: entrega informada a domicilio

Uno de las dudas a resolver pasaba por si este texto asignaría nuevas funciones a las boticas, como podría ser el caso de la atención farmacéutica domiciliaria. Una práctica que ha sido alabada por la propia presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, por su utilidad durante la pandemia. Además, este fórmula ya es empleada en otras CC.AA, como Galicia. La Consejería de Sanidad madrileña apuesta por este concepto de “entrega informada de medicamentos a domicilio”.

En concreto, el anteproyecto refleja que desde las oficinas de farmacia “podrán dispensarse medicamentos y productos sanitarios con entrega informada en el domicilio de los usuarios, a solicitud de éstos y siempre que concurran circunstancias que dificulten o impidan su desplazamiento a la oficina de farmacia de su elección”. Es decir, un servicio planteado para pacientes vulnerables y/o dependientes. Esta entrega a domicilio deberá ser realizada sin excepción por profesionales de la botica y no podrá suponer un coste adicional para el usuario.

Además se busca crea un registro de establecimientos farmacéuticos, en el que estarán integradas las oficinas de farmacia, los botiquines farmacéuticos, los depósitos de medicamentos y las unidades de radiofarmacia, permitiendo a los usuarios de estos conocer su titularidad y localización.

A su vez, buscan se amplían las secciones en las oficinas de farmacia, incluyendo la de nutrición y dietética, se reducen las cargas administrativas en lo que se refiere a la tramitación de los procedimientos de modificación de local y la transmisión de oficinas de farmacia a fin de garantizar la continuidad en la atención farmacéutica y se mantiene la política de flexibilización de horarios, y se actualiza la regulación de los turnos de guardia.