Teatro

Lo último de Mayumana llega a Madrid: ritmo, energía y percusión

El grupo israelí aterriza en el Teatro Rialto con “Currents”, un espectáculo inspirado en la histórica disputa entre Thomas Alva Edison y Nikola Tesla, corriente continua contra corriente alterna

Escena de 'Mayumana Currents'
Escena de 'Mayumana Currents'AYUNTAMIENTO DE HUELVAAYUNTAMIENTO DE HUELVA

Si hay algo que caracteriza a Mayumana es su forma particular de narrar sus espectáculos, su estilo totalmente original y único a golpe de tambores, timbales y energía, su música es una explosión de arte, ritmo, danza y percusión. Desde su nacimiento en 1996, esas son las señas de identidad del grupo israelí. La coordinación del ritmo como lenguaje universal que no necesita traducción. Palos, cajones, botellas, bidones, martillos, contenedores de basura, latas, agua, vasos y sus propios cuerpos les sirven para realizar un despliegue percutivo dentro de un escenario lleno de tuberías y andamiaje, esa es la base para expresar la música, el teatro, la danza y el humor a un ritmo frenético. Por algo su nombre deriva de la palabra hebrea «mayumanut», que significa destreza, habilidad. Después de girar por distintos países del mundo y por España Su último espectáculo, «Currents», se presenta ahora en el Teatro Rialto de Madrid, donde estará del 2 al 26 de junio.

Dónde Teatro Rialto. Cuándo del 2 al 26 de junio. Cuánto entre 24 y 50 euros

«Currents» fue creado para el festival de la Luz de Jerusalén y está inspirado en la histórica disputa que mantuvieron a finales del siglo XIX los dos empresarios e inventores Thomas Alva Edison, creador de la corriente continua, y Nikola Tesla, de la corriente alterna, que es la utilizada hasta hoy. De acuerdo con esa temática el grupo incluye sonidos electrónicos sumados a la percusión. Como afirma Boaz Berman, fundador y director artístico, «hay una gran carga de energía, de electricidad, encima del escenario y entre los miembros de la compañía, este es nuestro ADN». En este nuevo espectáculo, «los espectadores van a encontrar algunas de nuestras piezas más clásicas mezcladas con partes nuevas especialmente creadas para este espectáculo. En realidad –explica– estamos trabajando constantemente en ello, siempre añadiendo y modificando cosas porque es lo que más nos gusta, que todo sea dinámico, que pueda cambiarse para mejorar». El director tiene claro que su deseo es «conectar con deseos del público de pasarlo bien, tener el valor de romper límites, de ir más allá, de conectar mundos distintos para sorprender y excitar a los espectadores. Con este show queremos explorar el potencial de la fusión de ritmo y movimiento de manera que se pueda “visualizar” la música», afirma.

Para Hadas Nestel, artista integrante del grupo, «Currents» explora el potencial de la fusión de elementos. «Somos ocho artistas en el escenario en conexión con la electricidad, el video, la música electrónica y nuestro propio cuerpo para generar esa energía –explica–. Hay muchas formas de hacer percusión y crear ritmo, tocamos objetos irregulares, los de siempre y otros nuevos incorporados especialmente para este espectáculo, como aletas, contenedores con agua, copas, efectos electrónicos y de iluminación e imágenes multimedia de videoarte, para contar que la energía puede surgir de muchas maneras y siempre estamos buscando nuevos instrumentos y objetos que tengan un sonido especial», afirma Nestel. En Mayumana, «lo más especial es que cada uno tiene su talento individual y lo expresa tratando de conservar su estética y sensibilidad propia, por ejemplo, yo soy bailaora de flamenco, hay músicos, gente que viene del mundo de las acrobacias o del teatro, una mezcla de muchos estilos de artes para contar esa historia de energía especial, muy teatral y divertida, involucrando al público a participar de ella».

Esta mezcla de elementos diferentes crea un enfrentamiento eléctrico que es la base de la experiencia audiovisual del espectáculo. «Sin usar palabras –explica Nestel–, hay un verdadero viaje de los dos sectores eléctricos enfrentados, con propuestas artísticas diferentes, que muestran lo que parece una disputa, cada una con iluminación y sonido propios, cada uno con su energía, pero lo especial al final no es el enfrentamiento, sino el uso de las dos, no elegir entre una u otra, sumar energías es lo que da la fuerza, ese es el mensaje», concluye.