Pedro Muñoz Abrines, portavoz del PP en la Asamblea de Madrid

Muñoz Abrines: «Vamos a aprobar veinte leyes en solo un año»

El nuevo portavoz del PP en la Asamblea cree que la izquierda usa un discurso “estilo ametralladora” porque “necesita generar miedo para imponer sus medidas”

Cuando se entra en el despacho de Pedro Muñoz Abrines, en la Asamblea de Madrid, es imposible no fijarse en una de las estanterías en la que ocupa un espacio preferente la figura de Winston Churchill flanqueado, a su derecha, por el general Montgomery y, a su izquierda, por casi una decena de libros del político, militar, escritor y estadista británico. Abrines lo sabe todo o casi todo de Churchill. Tanto como de Presupuestos, contrataciones o del Reglamento de la Asamblea. Empezó leyendo una biografía que encontró por su casa; después un libro de discursos y acabó convirtiéndose para él en una fuente de inspiración. Y no solo por su brillantez dialéctica, sino también por su capacidad de defender férreamente, y casi en solitario, una política beligerante contra el nazismo.

Lleva 30 años como parlamentario, ¿se imaginaba que le iban a nombrar portavoz del PP en un momento clave, a un año de unas elecciones?

En absoluto, pensaba que con lo que quedaba de legislatura habría una continuidad, pero la presidenta tenía claros los objetivos y cómo tenía que distribuir el trabajo y me pareció bastante sensato tener un secretario general como Alfonso Serrano dedicado al cien por cien a trabajar para el partido. A partir de ahí, podría haber sido yo o cualquier otro compañero porque hay bastantes que podrían haber ejercido perfectamente la función. Yo estoy encantado porque, cuando llevas mucho tiempo en el Parlamento, lo conoces y te gusta, ser portavoz del grupo más importante es una satisfacción.

¿Ha recibido algún consejo de su antecesor, Alfonso Serrano?

Lo único que me ha planteado todo el mundo es que sea yo mismo. No tengo que imitar el estilo de Alfonso Serrano. Defendemos las mismas cosas, pero tenemos maneras de hacerlo diferente.

Estamos en un año decisivo. ¿Qué puede hacer el Grupo Popular desde la Asamblea para conseguir esa mayoría absoluta de la que hablaba Feijóo en el reciente congreso del PP madrileño?

Este año de legislatura va a ser probablemente el más importante y el más intenso desde el punto de vista legislativo de la historia de este parlamento. Vamos a tener que tramitar muchos proyectos de ley. Cuando conseguimos cerrar todo ese circuito de proyectos legislativos habremos logrado mejorar y modificar toda la legislación autonómica para generar un marco que va a beneficiar a todos los ciudadanos. Los madrileños verán que estamos haciendo un trabajo muy serio y cuando tú confías en la gente, ésta te devuelve la confianza y estoy convencido de que el año que viene los madrileños nos van a dar una mayoría superior a la que tenemos en estos momentos.

¿De cuántos proyectos de ley estamos hablando?

De unos 20 en un solo año. Va a haber normas más importantes que otras, pero todas con su trascendencia.

¿Y cuáles son las que tendrán mayor repercusión?

La Ley de Autonomía Financiera, que es una manera de hacer política, la ley Ómnibus de modernización y simplificación administrativa, que va a tener una enorme trascendencia en el ámbito económico y el funcionamiento de las empresas y el tejido productivo madrileño. También están las deducciones fiscales en materia de familia y maternidad o la ley de Servicios Sociales, que va a dar un salto cualitativo a la calidad de servicios asistenciales... Y así hasta veinte.

¿Pero cuántas de estas 20 pueden salir adelante teniendo en cuenta que para eso se necesita el apoyo de Vox? ¿Qué predisposición hay en el partido de Rocío Monasterio?

Hay un diálogo y un tratamiento que, con carácter general es positivo. Pero después hay que ir caso por caso viendo la realidad y los puntos de vista de cada uno. Por el contenido de la inmensa mayoría de las normas va a ser muy difícil que haya una discrepancia lo suficientemente grande como para que Vox se oponga y no consigamos aprobar ciertas normas.

Pedro Muñoz Abrines
Pedro Muñoz AbrinesDavid JarLa Razon

¿Vox ha sido un «socio preferente» cómodo?

Ha sido el único «socio» en esta Cámara. No le pondría etiqueta. Ha sido el socio que hemos tenido en un momento determinado, que ha trabajado defendiendo sus posiciones pero, con carácter general, ha sido leal por lo menos a los acuerdos a los que llegamos al principio.

¿Cree que Ayuso ha quitado espacio político al partido de Rocío Monasterio o lo ha desdibujado al haber coincidencia en algunas cuestiones que defienden?

Ayuso ha sabido aplicar los principios que defendemos desde el PP a la realidad de Madrid. Los principios deben ser un referente, no un arma arrojadiza ni un fin en sí mismo, porque puede tener consecuencias contrarias a lo que se pretende. Por ejemplo, si haces un discurso maximalista, exagerando la realidad, esa idea puede llegar a perder credibilidad entre sus propios votantes.

¿Cómo valora el clima político que hay en esta legislatura?

He visto estilos y ambientes distintos en el tiempo que llevo en la Asamblea y noto cuando el discurso no está anclado en la realidad, que es lo que le ocurre a la izquierda. Unidas Podemos y Más Madrid lo que quieren es imponer un discurso de manera forzada, intentar establecer una realidad paralela y la única manera que tienen de llamar la atención es con la crispación. Genera un discurso que conjuga una dialéctica estilo ametralladora, en la que te mezclan muchos conceptos, ideas y falacias por minuto.

La izquierda necesita alarma, generar miedo para imponer sus medidas intervencionistas. Creían que se iban a encontrar a un gobierno sumiso y no vamos a entrar en el terreno del insulto, pero siempre contestaremos con contundencia.

¿Si le pregunto por los portavoces de los otros grupos, ¿qué diría de cada uno de ellos? Por ejemplo, de Mónica García (Más Madrid).

Impostura.

Juan Lobato (PSOE).

Ingenuidad.

Rocío Monasterio (Vox).

Esta es complicada...(lo piensa)... Dureza.

Carolina Alonso y Alejandra Jacinto (Unidas Podemos)

Nostalgia del 15-M.

¿Qué opina de la reforma fiscal de Juan Lobato?

Es como lo que presentó hace poco, un cómic. Es un ejercicio de entretenimiento. Quiere bajar los impuestos a los madrileños. Y podría ser creíble si no fuese porque pertenece al PSOE y lleva mucho tiempo queriendo subírselos a los ciudadanos. Sánchez no le dejaría, por lo que tendrá que explicar si sería capaz de rebelarse o va a agachar la cabeza. Los barones socialistas tampoco le iban a dejar.

¿Cuáles son las principales armas de Ayuso para ganar las elecciones?

Su principal virtud el haber sabido identificar qué es Madrid y lo que quieren los madrileños.