Madrid: así lucirá la nueva M-30 ajardinada

Alrededor de 400 metros de hormigón de la M-30 pasarán a ser jardines verticales. Concretamente, en la avenida de la Ilustración, entre la glorieta de Mariano Salvador Maella y la glorieta de Nueva Zelanda. Una masa verde de alta resistencia, bajo consumo de agua y sistema de riego automatizado que no solo tendrá un fin ornamental; estos nuevos jardines contarán con sensores de contaminación que permitirán conocer cuál es la captación de contaminantes de los paneles, especialmente de las personas que viven cerca. No hay que olvidar, por otro lado, que esta “mancha verde” ganará terreno en la autovía, eliminando las pintadas vandálicas de la vía.

Se trata de Calle 30 Natura, una medida incorporada a la Estrategia de Sostenibilidad Ambiental Madrid 360 y que, como afirmó el alcalde esta mañana, se enmarca dentro de los compromisos de Cibeles para incrementar la infraestructura verde en la ciudad, contribuir a mejorar la calidad del aire y adaptar la capital al cambio climático. “Es un ejemplo de urbanismo sostenible, que supone un avance en la adaptación de la ciudad a los escenarios previstos de cambio climático”, aseguró José Luis Martínez-Almeida.

Esta iniciativa, que cuenta con presupuesto de 3,8 millones de euros, se desarrollará por fases. La segunda se ejecutará en 2024, cuando se transformen en vegetal 100.000 metros cuadrados de hormigón de la M-30. Para poder acceder a las estructuras para su revisión y mantenimiento se contemplará un sistema de paneles abatible de fácil acceso.