España

Tras el batacazo

Gabilondo dará un paso a un lado, aunque recoja el acta de diputado

Ferraz le señala la puerta de salida, asegurando que tiene madurez para “tomar su propia decisión”

El candidato del PSOE, Ángel Gabilondo, abraza al secretario del PSOE-M, José Manuel Franco, en la noche electoral
El candidato del PSOE, Ángel Gabilondo, abraza al secretario del PSOE-M, José Manuel Franco, en la noche electoralMarta Fernández JaraEuropa Press

El batacazo del PSOE en las elecciones madrileñas pone al candidato socialista, Ángel Gabilondo, en una posición muy comprometida de cara a su continuidad como portavoz en la Asamblea de Madrid. Ayer ya se escuchaban algunas voces en las que se aventuraba su abandono de la política, pero desde el PSOE-M se apresuraron de inmediato a desmentir esta posibilidad. «Os informamos de que Ángel Gabilondo recogerá su acta de diputado, seguirá trabajando en la Asamblea de Madrid y no se plantea dimitir. Desmentimos cualquier información que afirme lo contrario», aseguraron por la vía oficial.

Sin embargo, fuentes de la federación socialista detallaron que, aunque, en principio, la idea es que el candidato socialista no abandone el proyecto «lo más probable es que dé un paso a un lado en el momento oportuno, aunque la decisión de abandonar la política es decisión suya». Y es que el PSOE-M carece de un candidato de peso en este momento que pueda liderar el proyecto socialista y remontar la debacle electoral madrileña a dos años de las próximas elecciones autonómicas y municipales y después del «sorpasso» de Más Madrid. Se trataría así de ganar tiempo hasta conseguir un repuesto a Gabilondo.

La falta de alternativa al candidato es, precisamente, lo que le llevó a repetir al frente de la lista del PSOE a las elecciones anticipadas. En la cabeza de Sánchez está desde hace tiempo promover un relevo sustancial en la federación madrileña, pero estos cambios no llegaron a tiempo cuando Díaz Ayuso apretó el botón nuclear de las elecciones. La situación de la federación madrileña es muy complicada casi desde el desembarco de Sánchez en el PSOE cuando laminó a Tomás Gómez de la dirección.

Ayer uno de los rumores que cobraba fuerza era la posibilidad de que la Ejecutiva regional dimitiera en bloque y se formara una gestora tras los pésimos resultados y después del tutelaje de Ferraz-Moncloa en la campaña electoral no haya dado los resultados esperados. Grupos de WhatsApp de militantes venían exigiendo con contundencia que se diera el paso para proceder a una renovación del partido. Sin embargo, la Ejecutiva socialista madrileña en ningún momento se ha planteado esta posibilidad habida cuenta de que en el plazo de cuatro meses está prevista una renovación de los órganos del partido en el 40º Congreso Federal del PSOE que tiene como prioridad impulsar nuevos liderazgos que hagan más competitiva a la formación. Ayer, precisamente, la Ejecutiva socialista madrileña se reunió con un único punto en el orden del día: el análisis de los resultados electorales.

En el PSOE-M no se sienten, en parte, concernidos por la derrota, porque entienden que toda la estrategia, las listas y los equipos se externalizaron y pasaron a depender directamente de Moncloa y de Ferraz. «Las listas se aprobaron por WhatsApp», clama un dirigente. En todo caso, tanto en la dirección federal como en el Gobierno se afanaron ya ayer en marcar distancias con la derrota y con el propio candidato, del que ya hablan en pasado y dan por amortizado. Le muestran la puerta de salida abiertamente, alabando su inteligencia y madurez «para tomar su propia decisión». El ex ministro no tiene carné ni una vinculación orgánica, más allá de su cargo de portavoz en la Asamblea, que se da por hecho que no repetirá.

En el PSOE prefieren negar la mayor, «Madrid no es extrapolable a España», y ya tienen la vista puesta en el futuro. Aseguran que han «empezado a construir una alternativa» ganadora para las próximas elecciones, pero nadie olvida la «labor que ha prestado» Gabilondo durante estos meses.

De momento, el PSOE-M ayer informó de que se prepara para una «transición ordenada» de cara al Congreso Regional del PSOE-M que se celebrará a final de año. Los socialistas se plantean ahora reflexionar sobre los resultados. «Asumimos nuestros errores y no haber estado a la altura de lo que se esperaba», aseguran.

A corto plazo se ha decidido escuchar en las próximas semanas tanto a los órganos del partido como a la militancia “para analizar y tomar las medidas necesarias que permitan volver a conseguir la confianza de la ciudadanía madrileña”.

La Ejecutiva regional prevé reunirse la semana que viene “para seguir avanzando” ya que “en los meses que quedan hasta el Congreso Regional es imprescindible tener un diagnóstico preciso sobre cuáles han sido los motivos de esta pérdida de apoyo en las urnas y empezar a trabajar de inmediato para volver a recuperarla”, aseguraron desde la federación madrileña.