Opinión
Leganés y la revolución tecnológica del sur de Madrid
El polo de atracción de inversión en el que se ha convertido la Comunidad es una oportunidad única
Cuando hablo de innovación, no lo hago en abstracto. Hablo de empleo, de oportunidades, de calidad de vida. Hablo de una ciudad que ha decidido mirar hacia adelante. Porque la tecnología no es una moda: es una forma de gobernar. En estos momentos, la Comunidad de Madrid está siendo una región referente en el mundo y ha creado un ecosistema económico dinámico y de vanguardia que la convierte en un polo de atracción de inversión empresarial y de talento humano. Esto nos ofrece una oportunidad única a todos los municipios que formamos parte de esta región: debemos sacar a relucir nuestras fortalezas y trabajar en equipo para seguir creciendo todavía más.
Y con ese objetivo claro, Leganés está en marcha. Lo está con una dirección muy definida: ser el referente tecnológico del sur de Madrid. En solo dos años hemos demostrado que una ciudad que apuesta por el talento, la colaboración y el conocimiento puede reinventarse y convertirse en un motor económico, social y tecnológico para toda la región. Nuestra fuerza está en el equilibrio entre lo humano y lo tecnológico. En el sur de Madrid, la innovación tiene acento leganense.
La clave de este salto está en nuestra alianza con la Universidad Carlos III de Madrid, una de las diez mejores de España y entre las 250 más prestigiosas del mundo. En su campus de Leganés se forma cada año una nueva generación de ingenieros, científicos y emprendedores. Más de 5.500 estudiantes, decenas de laboratorios y un ecosistema donde la tecnología se convierte en realidad. Siempre he dicho que la UC3M es la fábrica de ingenieros más importante del país. Y no lo digo por orgullo local, sino por hechos. La universidad no solo forma talento, sino que lo pone en movimiento junto al Parque Científico y el Ayuntamiento. Esa colaboración público-privada nos ha permitido convertir la investigación en proyectos, y los proyectos en empleo.
Hace solo unos meses, la visita del Rey Felipe VI a Leganés fue una confirmación de todo ese trabajo. Por primera vez en la historia, Su Majestad presidió un acto oficial en nuestra ciudad: la gala anual de la Fundación Cotec, bajo el lema «Innovación y Juventud». Aquel día, Leganés fue capital nacional de la innovación. Y no fue casualidad: lo que aquí se está gestando representa el futuro de España. Somos una ciudad que innova con los pies en el suelo. Acogemos el primer Clúster de Inteligencia Artificial de España, con más de 40 empresas e instituciones trabajando en proyectos aplicados a la vida real: gestión inteligente del tráfico, eficiencia energética, formación y emprendimiento digital. Nuestro compromiso es que el talento que se forma en Leganés se quede en Leganés. Que las oportunidades no se marchen, sino que crezcan aquí. Por eso, en el Parque Tecnológico de Leganés (Legatec) hemos iniciado una profunda transformación. Solo en limpieza, retirada de escombros y refuerzo de la seguridad hemos invertido tres millones de euros. Y lo hacemos con una meta clara: iniciar en 2026 la segunda fase deurbanización, que sumará más de un millón de metros cuadrados de suelo empresarial. Queremos que Legatec sea el gran parque tecnológico y empresarial del sur de la Comunidad de Madrid.
Los datos confirman esta evolución. Según el informe Startup Radar 2025 de la Fundación Madrid+D, Leganés es ya la quinta ciudad de la región con más startups y también la quinta a nivel nacional en el ámbito Deeptech. Detrás de nosotros solo hay capitales como Madrid, Barcelona, Valencia o San Sebastián. En el sur, Leganés marca el ritmo.
La innovación no se mide solo en laboratorios. Se mide en cómo cambia la vida de las personas. Hoy, los vecinos de Leganés pueden realizar más de ochenta trámites municipales desde casa, a cualquier hora, gracias a la reciente sede electrónica. Hemos desplegado cámaras de videovigilancia inteligente en espacios públicos como La Cubierta o el Recinto Ferial, reforzando la seguridad y la convivencia. Pero quizá el proyecto más simbólico de este nuevo tiempo sea el autobús autónomo a demanda, que circulará por Leganés en 2026. Será el primero de España y el primero del mundo en funcionar bajo esta modalidad. Un vehículo 100% eléctrico, con 300 kilómetros de autonomía y capacidad para 52 pasajeros, que conectará el Parque Tecnológico con el centro urbano.
Es un proyecto impulsado por la Comunidad de Madrid, que nos sitúa a la vanguardia de la movilidad inteligente. Y no es un experimento: es un paso firme hacia un modelo de transporte limpio, eficiente y adaptado a las necesidades reales de los ciudadanos. El futuro no se anuncia: se pone en marcha.
La innovación también se escribe desde Leganés con nombres propios. Uno de ellos es Digital Anatomics, empresa nacida en la UC3M que aplica inteligencia artificial e impresión 3D a la cirugía. Su tecnología permite planificar operaciones con una precisión inédita, reduciendo hasta un 98% los errores quirúrgicos. Ya trabaja con hospitales de referencia en toda Europa. Y todo eso se hace aquí, en nuestra ciudad. Otro ejemplo es la colaboración entre la japonesa Anritsu, el Instituto IMDEA Networks y la startup local Leapwave Technologies, que ha hecho de Leganés la primera ciudad de Europa y una de las tres del mundo en acoger un «equipo de medida singular» de telecomunicaciones. Una muestra más de que la ciencia más avanzada también habla leganense.
Innovar no es una palabra vacía. Es una responsabilidad. Cada avance tecnológico tiene sentido si mejora la vida de las personas, si crea empleo, si hace más eficiente la administración o más habitable la ciudad. Ese es el espíritu que guía nuestra gestión: la tecnología al servicio de la gente. Por eso, cuando decimos que Leganés está en marcha, hablamos de algo más que de modernización. Hablamos de orgullo, de confianza, de un futuro compartido. Hablamos de una ciudad que no teme competir con las mejores, porque estoy convencido de que solo así se crece y se avanza. Leganés tiene presente, tiene talento y tiene rumbo. Y mi compromiso como alcalde es que ese rumbo siga siendo claro: avanzar con paso firme, sin perder nuestras raíces, hacia una ciudad moderna, sostenible, humana e innovadora.
* Miguel Ángel Recuenco es alcalde de Leganés