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Turismo sostenible
La otra cara de Alcalá, más allá de la ruta Cervantes
La oferta turística de la localidad se diversifica y despliega una serie de planes para disfrutar del otoño y el invierno
A puertas de finalizar el año, la Comunidad de Madrid se viste para la ocasión y se prepara para recibir a los turistas de todo el país y el mundo con una gran variedad de planes originales, dentro y fuera de la ciudad.
El espíritu navideño ya se puede sentir en cada rincón de nuestra capital gracias al recientemente inaugurado encendido de luces, y mientras las calles son más acogedoras que de costumbre, la alegría y las ganas de compartir crecen a medida que se aproxima diciembre. Para quienes quieran elevar la experiencia madrileña a otro nivel, las opciones para disfrutar no se limitan solo a la ciudad, sino que se expanden a las localidades más encantadoras y cercanas, dentro de la Comunidad.
Una de las joyas que más nos apetecerá conocer es Alcalá de Henares, ya que el municipio ha diversificado su oferta de ocio y cuenta con cálidos y entrañables refugios, perfectos para visitar en esta temporada otoño-invierno. Alcalá se ubica en la cuenca del río Henares y está a solo 30 minutos en coche desde el centro de la ciudad (40 km). Con más de 2000 años de historia, Alcalá de Henares es un destino para los amantes de la historia y la cultura. Guarda tesoros como «Complutum», uno de los enclaves romanos de referencia en España. Sede episcopal durante la época visigótica, fue una importante plaza para defender el valle del Tajo durante la Reconquista. La Alcalá medieval, con sus barrios cristiano, judío y musulmán, guarda espacios con recuerdos de mezquitas y sinagogas, de iglesias, oficios y lugares que dieron forma y carácter a una villa llena de contrastes y ejemplo de convivencia. Conocida como «ciudad del saber», muchos grandes escritores del Siglo de Oro español como Francisco de Quevedo, Lope de Vega, Calderón de la Barca, Tirso de Molina o San Juan de la Cruz estuvieron vinculados a ella. Pero, sin duda, entre todos destaca, con luz propia, Miguel de Cervantes, que nació aquí en 1547 y cuyo recuerdo está muy presente por todos los rincones de esta villa.
Algunas de las actividades típicas para hacer en la localidad son: visitar la Universidad de Alcalá de Henares, impulsada por el cardenal Cisneros, es un crisol de conocimiento que ha moldeado generaciones, siendo el primer modelo de ciudad universitaria de la historia; la Plaza de Cervantes, que alberga la estatua de Cervantes; la Casa Natal de Cervantes, donde nació el genio literario, el Palacete de Laredo, joya arquitectónica, o la imponente Catedral Magistral.
Más allá del Cervantes
Pero si lo que queremos es salir de lo común, la cuna del literario también ofrece planes enigmáticos, románticos y muy sabrosos. Así, nos sumergimos en diversos escape rooms como Escapology o BeXcaper Alcalá, para continuar la diversión en la fábrica de cervezas Enigma.
Para quienes aprecien bien una narrativa bien contada, en el Corral de Comedias, las tablas cuentan historias tan vividas que nos conectan fácilmente con nuestro pasado. El Mercado Cervantino es un acontecimiento popular que forma parte de la Semana Cervantina, declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional. Música, teatro, representaciones de calle, feria del libro, y otras muchas actividades culturales componen esta oferta turística que se celebra en octubre, fecha en la que se recuerda el bautismo de Miguel de Cervantes en la ciudad. Si bien estos planes se adaptan para toda la familia, para quienes vayan en pareja la oferta mejora aún más, puesto que Alcalá despliega opciones hoteleras de ensueño con precios muy accesibles. Si aún nos quedamos con ganas de más, a las afueras descubriremos los restos del castillo musulmán de Alcalá la Vieja, un testigo de la historia del lugar.
Un espacio para el detalle
En Alcalá, no podemos dejar de probar los manjares locales que se ofrecen en reconocidos restaurantes como: Eximio, presente en la Guía Michelin 2023; Ki-Jote, un japonés con rasgos mediterráneos; o las dos propuestas del Parador de Alcalá, la Hostería del Estudiante y Santo Tomás, dos opciones con cocina tradicional y sabores auténticos. Y ya que el clima frío nos abre el apetito para el dulce, es momento de degustar su postre típico, la costrada de Alcalá, una deliciosa creación de hojaldre, crema pastelera, almendra y merengue.
Con tremenda puesta en escena, la Comunidad de Madrid y Alcalá de Henares demuestran que la localidad es mucho más que solo literatura y que descubrir sus parajes será una experiencia que dejará una huella en el alma.
Cinco joyas madrileñas por descubrir
La Comunidad de Madrid alberga cinco Patrimonios Mundiales: el Paisaje de la Luz en la capital; el Monasterio y Real Sitio de San Lorenzo de El Escorial; la Universidad y centro histórico de Alcalá de Henares; el Paisaje Cultural de Aranjuez; y el Hayedo de Montejo. Cada uno ofrece una riqueza única, desde el excepcional esplendor de la naturaleza en Montejo hasta la magnificencia arquitectónica y la riqueza cultural de lugares emblemáticos como El Escorial, Aranjuez y Alcalá de Henares, que marcan hitos significativos en la historia y la herencia no solo de la región. Durante esta temporada, todos estos espacios ostentan un espectacular alumbrado de luces navideñas.
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