Cómo desempañar el parabrisas del coche si no funciona la calefacción

Las bajas temperaturas del invierno son tan malas compañeras de viaje como el calor excesivo en verano. Llega la época del año en la que toca rascar el parabrisas para quitar el hielo, encender el motor y poner el marcha la calefacción para tener una temperatura agradable en el habitáculo y evitar que la luna se empañe. El problema viene cuando el sistema de climatización del vehículo no funciona, el parabrisas se queda frío, se llena de vaho y la conducción se vuelve impracticable por la nula visibilidad.

Es posible que solo sea cuestión de paciencia y que la calefacción comience a funcionar correctamente, ya que este sistema utiliza el propio calor que genera el motor. Si el vehículo “ha dormido” a la intemperie y en una zona poco resguardada, lo mejor es esperar unos minutos antes de encender la calefacción. Si transcurrido el tiempo sigue sin salir aire caliente por los difusores, es el momento de buscar una explicación al problema.

¿Por qué no calienta la calefacción del coche?

El Real Automóvil Club de Cataluña (RACC) explica que los fallos en la calefacción normalmente se deben al mal funcionamiento de alguno de los elementos del sistema que permite la entrada de aire caliente al habitáculo. Entre los problemas más habituales se encuentra el fallo del termostato, de la bomba de agua eléctrica, la obstrucción de un manguito de agua o de una electroválvula. No obstante, también advierte de que el problema puede ser ajeno al sistema de calefacción y, en su lugar, esté relacionado con un fallo que no permita al motor alcanzar la temperatura correcta.

¿Cómo desempañar el parabrisas sin calefacción?

Deshacerse del vaho en el parabrisas sin la ayuda de la calefacción es luchar contra la física sin nuestra mejor arma. Aún así, es posible si se tiene mucha paciencia. Desde Carglass recomiendan abrir un poco las ventallas para eliminar el aire condensado dentro del coche, que es el motivo por el que los cristales se empañan.

Otro consejo es pasar una bayeta con agua y jabón antes de conducir. Es muy importante eliminar cualquier resto de agua de la superficie con un paño seco para que el vaho no vuelva a aparecer. Una vez no hemos deshecho del vaho, hay que intentar mantener una temperatura adecuada en el vehículo, de entre 18 y 19 grados.

Ni frio ni calor

Cuidado con pasarse con la temperatura de la calefacción. Una temperatura demasiado elevada produce los mismos efectos en la conducción que circular con una tasa de alcoholemia de 0,5g/l, la máxima permitida, según explica María García, ingeniera del departamento de Desarrollo y Aerodinámica de Seat, a la DGT.