El invento de dos guardias civiles que será obligatorio en 2024

Su trabajo como Agentes de Tráfico les hizo conocer a fondo algunas problemáticas de la seguridad vial. Y una de ellas es el riesgo que existe en la carretera cuando sufrimos alguna avería y tenemos que alejarnos del vehículo para señalizar la posición del coche con los triángulos. Es un momento y una situación de peligro que, desgraciadamente, ha derivado en muchos atropellos y fallecimientos. Para ayudar a reducir esta peligrosidad, los guardias civiles, ahora en excedencia, Jorge Costas y Jorge Torres, ambos gallegos, crearon un dispositivo luminoso denominado comercialmente “Help-flash”. Se trata de una baliza luminosa que es visible a un kilómetro, que funciona con una pila y que se coloca de forma magnética en el techo del vehículo o el carenado de la moto. No es necesario pulsar un botón ya que, en el momento del contacto con la carrocería, el dispositivo empieza a funcionar.

Todos los expertos coinciden en que se trata de un elemento que eleva la seguridad pues señaliza la incidencia al igual que los hacen otros coches de servicio público. Recientemente, el ministerio del Interior comunicó que está regulando el uso de este dispositivo y quiere hacerlo obligatorio en enero de 2024. En la actualidad ya está permitido y homologado, pero en combinación todavía con los triángulos. El debate sobre la idoneidad de eliminar estos elementos está abierto. El dispositivo V16, que es como se denomina a estas “luces”, tiene mayor alcance (sobre todo de noche), sin embargo, si el coche se encuentra justo después de un rasante o en una curva ciega el triángulo tiene sentido todavía.

El precio del help-flash arranca en 29,95 euros y ahora también existe otra versión denominada “Smart” que se vincula al teléfono móvil y en cuanto funciona conecta con el 112 para emitir nuestra localización y señal de auxilio.