Educación

Los estudiantes se rebelan contra aulas que parecen "hornos"

La consejería de Educación se defiende y asegura que está monitorizando las temperaturas en los centros y adecuándolos en materia de climatización

Las enfermeras murcianas impulsan un proyecto de prevención de acoso en las aulas
Un colegio de la Región de MurciaCARM

Los expertos en Meteorología tienen claro que los efectos del cambio climático son una realidad y ya llevan tiempo advirtiendo de que los episodios de olas de calor van a ser cada vez más frecuentes y más intensos, no solo en la Región de Murcia, sino en todo el arco Mediterráneo. Ante esta situación, las administraciones tienen la obligación de adecuar los espacios y proteger la seguridad, no solo de los estudiantes, en este caso, sino de todos los trabajadores de los centros educativos. En esta línea se han manifestado desde la Federación Murciana de Asociaciones de Estudiantes (FEMAE), que ha reclamado “medidas urgentes” a la consejería de Educación para que no se ponga en riesgo la salud de los alumnos. Una denuncia que han hecho después de conocer algunos casos puntuales en los que las altas temperaturas se han convertido en un impedimento para el normal funcionamiento de la actividad lectiva. El secretario de FEMAE, Andrés Liza, ha puesto como ejemplo las situaciones que se han vivido recientemente en algunos colegio e institutos de la Región, como el Instituto de Enseñanza Secundaria (IES) "Ramón Arcas Meca" de Lorca, o el IES "San Isidoro" de Cartagena, donde uno de sus estudiantes tuvo que ser atendido tras sufrir un aparente golpe de calor. En otros centros educativos de la Región, como el IES "Valle de Leyva" de Alhama, o el IES ‘Rey Carlos III’ de Águilas, han sido más previsores y tomaron la decisión de suspender las clases en algunas jornadas en las que el mercurio no ha dado tregua. Algo que desde FEMAE consideran “un parche”.

“Las aulas presentan unas temperaturas que superan ese umbral, acercándose o, en ocasiones, superando los 30º C en los primeros y últimos meses del curso, lo que dificulta el correcto desarrollo de las clases, pero aún más importante, es un riesgo directo contra la salud”, denuncian desde las asociaciones estudiantiles, que recuerdan que la temperatura de las aulas debe oscilar entre los 17 y los 27 grados como máximo, para evitar que se produzcan incidencias relacionadas con el ‘estrés térmico’ en el ámbito académico. Andrés Liza ha asegurado que “el calor es insoportable y toca usar abanicos, o crear alguno con papel, porque los ventiladores son insuficientes para combatir las altas temperaturas. Las últimas horas son terribles, porque el aula parece un horno. No podemos seguir así”.

Unas críticas a las que se han sumado desde el Partido Socialista en la Región. Su portavoz, Carmina Fernández, ha culpado directamente al Gobierno de López Miras de esta situación, al que acusa de inacción en esta materia. “Está claro que el Partido Popular lo que pretende es un desmantelamiento y un deterioro de la educación pública en todos los centros, en favor de la educación privada”, ha criticado Fernández, quien ha recordado que su partido presentó el pasado mes de julio una moción en la Asamblea Regional para que se atajase esta situación cuanto antes, una iniciativa que, en su opinión, el Ejecutivo regional ha desoído.

Educación responde

Desde la consejería de Educación aseguran que son sensibles a esta realidad y que están en contacto permanente con todos los centros educativos para tratar de satisfacer sus demandas. Fuentes de este departamento consultadas por LA RAZÓN trasladan que el Gobierno regional trabaja desde hace años en distintas acciones para mitigar el efecto del calor en los centros educativos, siempre teniendo en cuenta la eficiencia energética y la sostenibilidad bioclimática, como el "Plan de Eficiencia Energética y Reconversión Bioclimática 2020-2027". En concreto, el Ejecutivo autonómico ha llevado a cabo un total de 166 actuaciones en centros educativos de 38 municipios de la Región, que pasan por el cambio de cubiertas o la instalación de placas solares. Además, desde la Consejería que dirige Víctor Marín informan de que ya están previstas más actuaciones en 7 centros educativos de la Región -algunos de ellos, los mencionados anteriormente-, como la sustitución de carpinterías y acristalamientos, el cambio de cubiertas, la mejora del aislamiento térmico, la instalación de sistemas de climatización o la mejora de la iluminación. Todas estas iniciativas van a suponer una inversión cercana a los 9 millones de euros y van a servir, según el Ejecutivo autonómico, para hacer más llevadero el calor a alumnos y profesores.