Opinión

Problemas de familia

Que cada cual haga lo que le venga en gana con su existencia, siempre y cuando no nos afecte a los demás. «Vive y deja vivir», te diría mi padre. Que Pablo Iglesias e Irene Montero, líderes de un partido político, se hayan comprado un chalet de 660.000 euros me parece perfecto, que tengan que pagar equis letra mensual y que eso trascienda puede molestarles, de acuerdo. Pertenece a su intimidad, pero me sorprende su inocente reacción a las críticas, a estas alturas. Vivimos en un país en el que muy poco puedes esconder si te dedicas a la vida pública. Sabían que esto podía ocurrir, que su casa sería motivo de comentarios en cualquier bar. Que la hipoteca abultada de la vivienda reste votos o afecte negativamente a su partido es algo que ambos deberían haber sopesado.

«Nunca digas de este agua no beberé», «cada casa es un mundo», comentaría mi madre. En la del PP, por ejemplo, adolecen de un mal de másteres y carreras fantasma. No sé si pensar en el enemigo como fuego amigo o rival. Cayó Cristina Cifuentes y ahora todas las pistolas apuntan a Pablo Casado. Él se queja, vehemente, de un ataque que le parece injustificado. Desde luego, si se demuestra que no cometió irregularidades deberíamos hablar, en su caso, de linchamiento. Escucho al señor Vargas, ex director del centro Cardenal Cisneros en el que Casado obtuvo la licenciatura en Derecho, y me echo a temblar por sus versiones contradictorias. Vivimos en un país minado de viejas del visillo. Ojo con lo que compras, porque todo se sabe; cuidado con determinados parientes malintencionados, «no es oro todo lo que reluce».

«Quien no se consuela es porque no quiere», esto te lo digo yo. Para tribu problemática, la real británica. Al emparentar con la reina Isabel II, ¿qué será de los pobres familiares plebeyos de Meghan Markle? Nadie ha reparado en ellos, tan próximos al destino del príncipe Harry. El grupo humano donde se crió la actriz no puede ser más variopinto: su padre titubeante no irá mañana a la boda, la hermanastra llama a Markle «princesa trepa», el primo cultiva marihuana ... Ríete tú de nuestras desavenencias domésticas. Observaba la otra noche a Felipe VI, disfrutando del Atleti. ¡Nos quejamos de vicio!, pensé.