Opinión

Franco ha muerto

Los políticos son hoy la segunda mayor preocupación de los españoles, solo por detrás del paro. A este paso, el mes que viene les veremos encabezando el barómetro del CIS. En este contexto de creciente crispación, asistimos a una serie de hechos insólitos, impensables no hace tanto.

Pobres funcionarios aragoneses, que tienen que empezar a practicar el lenguaje inclusivo en su día a día. Deben tirar del nuevo manual no sexista que les impone cambiar, por ejemplo, la palabra «niño» por «infante», o usar «la población reclusa» en lugar de «preso» o «presa»..., y otras tonterías del estilo. ¿Y qué me dices de la última estrategia del PP para recuperar a sus hijos pródigos de VOX? Se sirven de la baja natalidad para plantearse, precisamente ahora, la derogación de la ley del aborto. PP, queriendo parecerse a los de Abascal. Ciudadanos, en pugna permanente con populares o socialistas, según le dé el viento. Y el PSOE, irreconocible, sumido en la mayor crisis de su historia por culpa de la gestión de Cataluña. Identidades desdibujadas.

Gran sinsentido que Pedro Sánchez quiera dialogar en una mesa sin Ciudadanos y PP, representantes del sentir de tantísimos catalanes. Enorme absurdo tomar de la mano, únicamente, al independentismo y sus ideas de bombero, comprar la exigencia de un «relator» en esa mesa, a cambio de que ERC y PdeCat te permitan seguir gobernando. No puede decirlo más claro Felipe González, ni más alto Alfonso Guerra: ¿Es que somos como Burkina Faso? ¿Por qué hay que degradar las instituciones? ¿Hay alguien ahí? Mal vamos, presidente, si en tu propio partido piensan que estás saqueando la Democracia y así lo expresan, porque no tienen nada que perder.

Cataluña enfrenta como nunca a los socialistas mientras el resto del país sale a manifestarse. Por la unidad de España, sí, pero también por sus propias penurias: por la sanidad, por la educación, por las pensiones. Ahí tenemos a diario a los médicos, a los agricultores, a los funcionarios de prisiones, ¡qué se yo!

Estimados dirigentes españoles: Franco ha muerto, pero está más presente que nunca en las mentes de algunos de ustedes, absortos en sus respectivas luchas ideológicas mientras los problemas cotidianos de este país siguen aumentando.

¿Por qué no van todos ustedes, de una vez, a lo importante?