Opinión

Censura y manipulación

Una de las causas por las que el coronavirus se expandió en China fue el control y la censura en la información. Si los medios chinos hubieran informado mucho antes de la gravedad de la epidemia, se hubieran salvado miles de vidas y quizás evitado la actual pandemia.

En España quizás también se hubieran salvado miles de vidas y evitado miles de contagios si el gobierno hubiera actuado antes y no hubiera puesto en riesgo a la población alentando y no prohibiendo la manifestación del 8M. Si llevar la iniciativa, adelantarse a los acontecimientos y demostrar unidad y firmeza son claves para afrontar una crisis, en nuestro país está funcionando todo lo contrario.

Las desavenencias entre los miembros del gobierno están a la orden del día y en cada decreto que aprueba el Consejo de Ministros, hecho que trasciende a la opinión pública muy a pesar de la censura y la manipulación que intentan imponer. Parece mentira que mientras luchan contra los bulos y la desinformación, sean ellos, el gobierno, quien los origine. E incluso tengan la osadía de desentenderse de los enfermos y de los sanitarios de la Comunidad de Madrid, retrasando la llegada de material, sacándose de la chistera expertos, que casualmente son de Podemos y que dócilmente les da voz TVE en sus informativos. El objetivo: culpar al PP y a Diaz Ayuso de la inoperancia de Sánchez y compañía.

Las ruedas de prensa están controladas, las preguntas revisadas, no existen las repreguntas y a veces se inventan preguntas. Cuando no tienen nada que decir, pero quieren parecer decir, utilizan el lenguaje inclusivo y con tantas os/as, eh, oh, ya te has perdido. Decía Malcolm X que con una hábil manipulación de la prensa pueden hacer que la víctima parezca un criminal y el criminal, la víctima.