Opinión

Pactos de Estado

Avanzan las operaciones para exigir a la oposición su entrega sin condiciones. El esquema sanchista, O yo o el caos, que tan buenos resultados brinda al faraón. Mientras la inmensa mayoría de los ciudadanos aspira a un frente común, el gobierno exige unos pactos de la Moncloa donde el populismo gozaría de puestos esenciales. La alternativa a prescindir de un pirómano como Pablo Iglesias, con un discurso radicalmente contrario al del PCE durante la Transición, pasa por fumigar al Pp y Ciudadanos. Su colaboración debe ser absoluta, acrítica y unánime. Olviden que durante la crisis del ébola los políticos que hoy gobiernan exigieron la cabeza de una ministra tras el sacrificio de un chucho. Obvien la ofensiva propagandística de las últimas semanas. Con las terminales de la guerra mediática empeñadas en traspasar la culpa a la Comunidad de Madrid, a la que acusan de recortar la sanidad pública mientras el gobierno baila pechito con pechito junto a unos nacionalistas catalanes que trituraron los servicios sanitarios locales y/o ignoramos los grandes tijeretazos en Andalucía. Por no hablar de que nadie ha explicado qué demonios tiene que ver todo esto con la respuesta a una pandemia. Si algo demuestran ejemplos como el de Corea del Sur es que la clave fue preventiva. Del tsunami sólo podían salvarnos unas autoridades que hubieran pecado por exceso. Comprando millones de tests por anticipado. Haciendo uso de la tecnología y, en caso necesario, decretando cuantas medidas hubieran considerado pertinentes no bien comenzaron a acumularse los infectados. Qué hacemos, al fin, con las llamadas al diálogo de sujetos como José Zaragoza, diputado del Psc-Psoe: «Saben que se actuó antes que el resto de gobiernos. Saben que se han evitado más de 16.000 muertos. Saben que se están tomando medidas de izquierdas para salvar a los más débiles. Tienen miedo que recordemos como [sic.] la derecha solo rescato a los bancos. Cínicos». O bien: «En los momentos más duros para todos los españoles la derecha siembra el odio y la mentira. En vez de arrimar el hombro pagan anuncios y difunden bulos para provocar el miedo. La derecha como siempre a lo suyo, conseguir el poder por cualquier medio». Ayudaría que algunos se abstengan de escupir veneno durante unos días. Pero la superioridad moral permite afear al prójimo toda la mierda que tú te permites. Porque lo vales, yeah.