Incertidumbre positiva

El reconocido escritor y conferenciante Andrés Pascual acaba de publicar el libro «Incertidumbre positiva». Nos invita a eliminar el miedo, abrazar la inseguridad y el caos y dar la bienvenida al cambio, fluir con él. Filosofía que comparto plenamente. Y que funciona. Y es que no tolerar la incertidumbre empuja a la inacción. Además cercena la creatividad, y otros muchos beneficios, y significa poner trabas a todo lo que nos ilusiona, nos interesa y nos desafía, que es precisamente el motor interior de la incertidumbre positiva. Andrés propone pasos prácticos como vaciarnos de malos hábitos, destruir las certezas. Esas limitaciones que provoca un lenguaje negativo o nuestras creencias limitantes son las que traen consigo los fracasos y la destrucción: Aportan involución. «Lo único que sabemos a ciencia cierta es que no podemos saber nada a ciencia cierta». Para poder destruir certezas, averigüemos de dónde vienen, sin juzgarlas, sin compararte con los demás, cuidando el lenguaje y extrayendo el beneficio por el que fueron creadas y sustituyamos la certeza limitante por otra más esperanzadora y positiva. Lo bueno de que no hay nada cierto, es que no estamos anclados a nada por lo tanto todo es posible: tenemos libertad para elegir y para crear nuestro destino. También propone:

• dejar atrás el pasado. Las empresas valoran ahora más el coeficiente de adaptación que el coeficiente intelectual.
• crear tu futuro ahora: la era de la incertidumbre es una era de infinitas opciones de prosperidad porque entra en juego algo tan importante como es la creatividad que es nuestro activo más valioso. Nuestras acciones van creando nuestro futuro.
• mantener la calma. El estrés nos incapacita para tomar decisiones. Hay que descansar, sacar tiempo para pensar, gestionar el tiempo saludablemente e identificar lo que nos estresa. Las meditaciones y la respiración nos ayudan a que las aguas se calmen. Pero sobre todo ayuda decir adiós al perfeccionismo y admitir que hay muchísimas cosas que no podemos controlar.
• confiar en tu estrella
• disfrutar el camino.
  

También nos recuerda Andrés Pascual que Ortega y Gasset dio la vuelta al dicho popular: «dime a qué atiendes y te diré quién eres».