Opinión

El Barça en campaña

Exige una explicación esta operación a cuatro días de las elecciones del Barça

Sin duda el Barça «es más que un club» de fútbol, aun siendo uno de los más importantes del mundo. Su influencia trasciende el ámbito deportivo para adentrarse en el político, e incluso en el cultural y, en última instancia –pero no menor– en el audiovisual, por mor de los cuantiosos recursos generados por los derechos televisivos.

El domingo están convocadas las elecciones a la presidencia del Club, que por todo ello atraen intereses adversos y diversos, pero con el común denominador de controlar la institución. En ese contexto, por supuesto que no son casuales las aparatosas detenciones realizadas por los Mossos en el marco de una investigación, pero sin orden judicial explícita. Si nada es casual, menos una actuación como ésta que pone el foco en un caso conocido como el «Barçagate», tan condenable como nimio frente a otras realidades afloradas recientemente, como el contrato de Messi, por ejemplo.

Exige una explicación esta operación de la Policía autonómica a cuatro días de las elecciones del Barça, en pleno escenario de negociaciones por el próximo Govern, y con un terrorismo callejero en ebullición, no alejado de la CUP. Ésta es ahora el árbitro del futuro Govern por voluntad de los separatistas y desea una Generalitat radicalizada en la senda del Procés.

Estos sucesos están tan relacionados entre sí, que no es difícil encontrar el hilo conductor que urde la trama: «Poderoso caballero es don Dinero», y hay demasiado en juego, también con el control televisivo por medio. Mientras, arde Barcelona.