César Lumbreras

La OMC a escena

Con la que comienza mañana en Bali (Indonesia), llevo ya metidas entre pecho y espalda unas cuantas conferencias ministeriales de la Organización Mundial de Comercio (OMC) y también de su antecesor, el «famoso» GATT. En todas ellas el capítulo agrario ha sido uno de los más conflictivos y la UE ha tenido que bailar con la más fea, haciendo frente a acusaciones de distorsionar el comercio mundial con las ayudas que se otorgaban en el marco de la PAC, hecho que no siempre se correspondía con la realidad. En el balance me quedo con la que se celebró en Marrakech, ciudad en la que se escenificó el acuerdo de la Ronda de Uruguay, y con la que tuvo lugar en Seattle hace ahora 14 años, cuando estalló en toda su crudeza el movimiento antiglobalización, provocando numerosos y violentos incidentes en esta ciudad del noroeste de Estados Unidos.

Durante la Conferencia que comienza mañana en Bali, el capítulo agrario no es el que plantea más problemas, pero, al final, todo se puede liar. Quizás los agricultores y ganaderos españoles piensen que esto queda muy lejos y que lo que hablen los ministros en esta isla de Indonesia no tiene repercusión para ellos. Si es así estarían en un craso error, porque lo que se negocia allí termina llegando a la PAC más tarde o más temprano. Un ejemplo, cuando la UE decidió sustituir las ayudas acopladas y vinculadas a la producción por otras desacopladas, que se han pagado por superficie, tanto si se producía como si no, lo hizo obligada por los resultados de las negociaciones en la OMC para liberalizar el comercio mundial. ¡Cuidado, por lo tanto, con lo que se cuece durante estos días en Bali!