Mas y sus debilidades

Nada nuevo bajo el sol tras el discurso de Mas, que ha dejado traslucir sus debilidades. Sabe que el pacto con ERC es endeble y que tendrá como constante la inestabilidad, cuando no la inoperancia. A sólo 24 horas de firmarlo, está renegando de su acuerdo. Formalmente no, evidentemente, pero en el fondo Mas ha hecho dos movimientos interesantes. Primero, ha lanzado un guiño a los socialistas para que entren en un pacto amplio. El ofrecimiento denota la fragilidad de los acuerdos con ERC. Segundo, ha eludido en todo momento hablar de 2014. Ha hablado de la consulta y ha trazado su hoja de ruta hacia la independencia, pero no ha dicho nada del 2014. Sorprende esta actitud porque en la firma con ERC el 2014 era el epicentro del acuerdo. Quizás, Mas con este movimiento –de un calculado funambulismo político basado en la ambigüedad– también ha mirado al PP. El 2013 viene antes del 2014 y será un año difícil, cuando menos. Se tendrán que negociar muchas cosas en Madrid y se necesitará del Gobierno para pagar nóminas y deudores. Hoy por hoy, los puentes con los populares están destruidos porque unos y otros se han afanado en volarlos. Habrá que rehacerlos a marchas forzadas. Mas será investido presidente con los votos de ERC. En el imaginario nacionalista, el presidente que llevará a Cataluña a la independencia. En la realidad, el presidente con más inestabilidad de todas las legislaturas desde 1980.