Julián Redondo
¿Mejor con diez que con once?
De la ocurrencia de Helenio Herrera a la perdición del Manchester, que con diez jugadores fue de más a menos. Al Madrid, perdido como estaba, no le quedaba más remedio que lanzarse al ataque y aprovechar la superioridad numérica, y la inspiración de Diego López. Acierto pleno y suerte, al no ver el árbitro lo que pareció penalti de Ramos con el 1-2.
l ¿Mereció Nani la expulsión?
–La entrada inolvidable del holandés De Jong a Xabi Alonso en el Mundial de Suráfrica ni siquiera fue tarjeta, arbitraba Howard Webb, también inolvidable; la de Nani a Arbeloa, casi idéntica, no ofreció dudas a Çakir, el árbitro turco, roja. Acertó. El karate, en el tartán. El Madrid iba a jugar algo más de media hora contra diez. La reacción de Mourinho, lógica, al retirar a Arbeloa para apoyar el ataque con Modric. Se notó su incorporación y no sólo por el golazo que metió desde fuera del área (1-1). Fue la redención de su equipo e intervino también en el que Ronaldo no celebró.
l Tras el 1-2, ¿pecó Mourinho de «amarrategui»?
–Con el 1-1 mandó calentar a Benzema, cuando se adelantó en el marcador cambió de táctica. Tocaba asegurar el pase a cuartos. El Manchester necesitaba dos goles y no recibir más; la solución de Mourinho: Pepe por Özil. Primaba lo práctico sobre el romanticismo.
l ¿Rooney en el banquillo?
–En las horas previas al partido se habló de la posible suplencia de Wayne Rooney, por dos motivos: porque tenía ligeras molestias o porque su trabajo defensivo en el partido de ida no convenció a Ferguson. Sea como fuere, Sir Alex se inclinó por Giggs y hasta la novia de Rooney, Coleen, mostró su sorpresa en las redes sociales. Lo que parecía un castigo hizo más daño a Coentrao, superado por el veterano Giggs, que al Manchester en el primer tiempo. Cuando entró en el minuto 73 colaboró en la inútil batalla de la épica. Fue testigo en el campo de la clasificación del Madrid. Inapelable.
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