Entrevista
«Ajo y cebolla, aliados para la tensión»
La Dra. Cristina Sánchez, responsable de Insuficiencia Cardíaca del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid, explica cuáles son las claves de la alimentación que hay que seguir frente a la hipertensión
-¿Existe una relación directa entre dieta e hipertensión?
-Así es, la hipertensión arterial puede favorecerse por la dieta, concretamente con el consumo de ciertos alimentos.
-¿Es verdad que el salero es un enemigo que no debería colocarse encima de la mesa? ¿Habría que suprimir algún alimento para cuidar nuestra tensión?
-La población general puede consumir hasta cinco gramos de sal al día, lo que equivale a dos gramos de sodio. Sin embargo, los pacientes de grupos de riesgo, como hipertensos, ancianos y niños, no deberían sobrepasar los 3,8 gramos. Incluso, hay grupos en los que esta cantidad se ve reducida a un gramo, principalmente aquellos con insuficiencia cardíaca o renal. Se debe evitar por tanto añadir sal a la comida, tanto de cocina como yodada o marina.
-Además de la sal ¿hay que reducir el consumo de alimentos que la contienen?
-Sí, ya que el 80% del consumo de sal procede de alimentos procesados y por lo tanto se debe reducir su consumo al mínimo. Se deberían prácticamente suprimir las conservas en general (aceitunas, anchoas, etc.), los precocinados como los caldos industriales o los purés instantáneos, y los condimentos salados o salsas. Por último, los hipertensos no deberían consumir bicarbonato sódico ni otros derivados, ni medicamentos efervescentes, así como antiinflamatorios.
-¿Algún alimento obligatorio para cuidar nuestra tensión?
-Es importante seguir una alimentación saludable, variada y suficiente. Se pueden recomendar alimentos con efecto vasodilatador, como el ajo y la cebolla. Además, se pueden incorporar a la dieta por sus efectos beneficiosos las semillas de lino, chía o cáñamo que tienen un alto contenido en omega-3, y las nueces (cuidado con frutos secos tostados y/o salados).
-¿Todo el alcohol es nocivo para el corazón o depende de cuál y en qué proporción?
-El alcohol tiene un efecto vasopresor, es decir, reduce el diámetro de los vasos sanguíneos y aumenta la tensión arterial; de modo que un consumo excesivo puede desencadenar hipertensión arterial.
✕
Accede a tu cuenta para comentar