Entrevista
«La cirugía de la obesidad presenta un altísimo porcentaje de éxito»
Entrevista al Dr. Salvador Morales, responsable del Centro de Excelencia en el Tratamiento de la Obesidad y jefe de Cirugía del Hospital Quirónsalud Sagrado Corazón de Sevilla
1. Han puesto en marcha el Centro de Excelencia en el Tratamiento de la Obesidad. ¿Se puede acabar con este problema?
Está demostrado que el único tratamiento eficaz contra la obesidad con índices de masa corporal por encima de 35 es la cirugía, con un altísimo porcentaje de éxito.
2. ¿Para qué tipo de pacientes está pensado este centro?
Todo paciente con obesidad y sobrepeso tiene cabida, ya que existe un equipo multidisciplinar que evaluará el caso y establecerá si el tratamiento es quirúrgico, que serán la gran mayoría, o puede intentarse un cambio conductual apoyado en terapia médica. Además, el tratamiento quirúrgico no solo está enfocado en la pérdida de peso y en la mejora de la calidad de vida, sino también en la curación de enfermedades como la diabetes tipo II, la hipertensión o la dislipemia y el mejor control procesos como cardiopatías. Todo esto se consigue gracias a la cirugía, por los mecanismos hormonales que se activan con ella, y por la pérdida de peso.
3. ¿Cómo es su abordaje?
La clave actualmente son dos aspectos: por un lado, el manejo multidisciplinar del paciente, porque independientemente de la cirugía se trabaja en que la pérdida de peso sea correcta, llevando de la mano al paciente en todo el proceso. Además, este equipo trabaja por un cambio conductual del paciente, tanto en sus hábitos alimenticios como en su actividad física. El otro aspecto clave es trabajar con el paciente para determinar la técnica más adecuada para él, en función de la edad, el grado de obesidad, la presencia de una diabetes tipo 2, la existencia de enfermedades concomitantes, reflujo gastroesofágico, etc. Se estudia a cada uno de forma individualizada parar obtener los mejores resultados.
4. ¿Qué profesionales forman ese enfoque multidisciplinar?
La cirugía es la base del proceso, pero sin un manejo en equipo se ha demostrado que no se obtienen los mismos resultados. Tenemos un endocrinólogo que estudia al paciente para detectar otras causas y que controla el postoperatorio para detectar posibles déficits vitamínicos, de minerales y de oligoelementos, y la retirada de medicación de ciertas enfermedades que mejoran con esta cirugía. Además, el nutricionista prepara al paciente para la intervención, para mejorar la esteatosis y disminuir el volumen hepático para facilitar la cirugía y se encarga en el postoperatorio de la adaptación a la ingesta, fomentando hábitos saludables en la alimentación. Nuestra psicóloga valora la indicación de la cirugía y trabaja con el paciente para mejorar cómo se enfrenta a este proceso, modulando sus temores y trabajando sus expectativas. Y en el postoperatorio es importante su labor para mejorar cómo se enfrenta el afectado a un cambio conductual de su vida diaria. Por último, nuestros preparadores físicos ayudan al paciente para que cambie sus hábitos, aconsejando cómo realizar actividad física en función de la pérdida de peso.
5. ¿Qué herramientas usan?
Lo principal es que nos ponemos en el lugar del paciente, sus necesidades, sus miedos y sobre eso empezamos a buscar la solución más adecuada. Para ello ponemos en marcha un circuito de consultas en el mismo centro donde el paciente es valorado por cada uno de los especialistas para realizar un manejo integral, que acabará en muchos casos en la indicación de un procedimiento quirúrgico y un manejo multidisciplinar en el postoperatorio. Además, todo ello se realiza en un ambiente agradable, con consultas renovadas y rediseñadas para que la experiencia global sea más reconfortante.
6. ¿Qué novedades quirúrgicas son más prometedoras?
Lo más importante es que la innovación que tenemos en el quirófano hoy en día ha hecho que la cirugía sea más segura y se haya disminuido el índice de complicaciones. Si a eso le unimos la correcta indicación de la técnica y la experiencia acumulada, todo eso hace que el circuito funcione muy bien y los resultados sean muy buenos. Además, tenemos conciertos con empresas que desarrollan instrumental quirúrgico o sistemas de imagen para quirófano que nos garantizan actualizar e implementar todas las innovaciones y poderlas ofrecer a nuestros pacientes.
7. A nivel nutricional, ¿qué avances significativos hay?
Por un lado, la elaboración de un manual nutricional que el paciente recibe en las fases iniciales del programa de cirugía bariátrica que le guían mediante diferentes modelos de dietas personalizadas. Es clínicamente muy importante lograr una pérdida del 5-10% de peso antes de la intervención. Para ello es frecuente el empleo de «dietas de muy bajo contenido calórico», a veces difíciles de realizar, por lo que disponemos de un nuevo protocolo donde previa valoración por el especialista en Endocrinología y Nutrición ayudamos al individuo –mediante el empleo de un novedoso tratamiento farmacológico– a reducir su apetito. La última gran novedad ha sido el desarrollo de dos productos nutricionales diseñados para el paciente sometido a una cirugía bariátrica: un suplemento proteico y un polivitamínico, imprescindibles para asegurar un adecuado estado nutricional tras la operación.
8. ¿El psicólogo es esencial?
La obesidad tiene siempre también un factor psicológico a tratar. Este profesional debe evaluar al paciente antes de la intervención, descartando trastornos mentales incompatibles con el proceso. Además, acompaña terapéuticamente al individuo en este cambio físico tan importante y rápido. Un trabajo de adaptación a las nuevas circunstancias, aprovechando la oportunidad como mejora personal.
9. ¿Cómo debe ser el estilo de vida de estos pacientes?
El sedentarismo, junto a otros malos hábitos alimentarios y factores endocrino-metabólicos y genéticos, suponen en muchas ocasiones grandes trabas. Dar la vuelta a estos hábitos es clave para que el resultado de la cirugía sea el deseado y se mantenga la pérdida de peso. El cambio concierne a la alimentación –enseñar al paciente a comer alimentos saludables–, en pequeñas dosis y más veces al día; y a la práctica de ejercicio moderado de forma continuada para mejorar su salud mental y física.
10. ¿Cuánto tiempo es necesario para lograr el objetivo?
Los resultados son espectaculares tras la cirugía. Lo primero que nota el paciente son la pérdida de la ansiedad por comer, debido a los mecanismos hormonales que se ponen en marcha tras la cirugía, y que aquellos que son diabéticos tipo II e hipertensos mejoran el control de sus enfermedades e incluso llegan a abandonar en muchos casos la medicación. Además, progresivamente van mejorando su calidad de vida, están más ágiles, mejoran sus relaciones sociales y, en general, se les ve mucho mejor conforme van perdiendo peso de forma paulatina. Es una satisfacción para nuestro grupo observar esa mejoría y verlos más felices.
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