Advertencias para un otoño saludable

El otoño es tiempo de cambios, de frío y menos horas de sol. El cardiólogo Manuel de la Peña, galardonado con la insignia de oro de la Asociación de pacientes coronarios, aporta cinco consejos fundamentales para este tiempo decreciente, a saber:

Tomar vitamina D. Aporta vitalidad. Los niveles normales en sangre no deben ser interiores a 30. Lo óptimo es 50. Evitamos falta de energía, dolores musculares y dolores articulares.

Vitamina C lipomomal que se absorbe mejor a través de nuestro sistema linfático, fortalece las defensas y estamos más protegidos contra los posibles resfriados del otoño.

Si tenemos más de 40 años, debemos hacernos una analítica para conocer la situación hormonal, para saber si tenemos necesidades de reemplazo de algún tipo de hormona, como puede ser testosterona, estrógenos, progesterona...

También hay que beber al menos ocho vasos de agua al día para prevenir la deshidratación. Es importante limitar el consumo de bebidas con alto contenido de azúcar, refrescos y alcohólicas, que no contribuyen a la hidratación.

Hacer tablas de ejercicio moderadas, al menos 20 minutos diarios, combinado con ligeros levantamientos de pesas. Así aumentaremos la secreción de endorfinas (hormona de la felicidad) y tonificaremos el cuerpo, activando la circulación, combatiendo el estrés y durmiendo mejor. El ejercicio ayuda a mantener un peso saludable y aumenta la energía.

Un control estricto de la hipertensión y el colesterol malo. Es esencial que las cifras de tensión arterial sean inferiores a 130/80, que el LDL esté topado y la lipoproteína (a) inferior a 50. De lo contrario, son factores de riesgo cardiovascular. Y vivir en calma. Nada ayuda más a la salud que huir del estrés y relajarse. La musicoterapia, clave.