Alimentación
Saúl Sánchez, nutricionista: "Este es el problema de cenar solo yogur o fruta"
Conviene tener en cuenta algunos matices al optar por cenas ligeras
Cenar únicamente yogur o fruta se ha convertido en una práctica habitual entre muchas personas que buscan perder peso rápidamente. Sin embargo, el nutricionista Saúl Sánchez advierte que, aunque esta estrategia puede tener cierto efecto en la pérdida de grasa, también entraña riesgos si no se planifica con una perspectiva global de la alimentación y el ejercicio físico.
El especialista explica que reducir la ingesta calórica por la noche puede favorecer un balance energético negativo, lo que facilita la pérdida de grasa corporal. No obstante, puntualiza que esta medida solo resulta efectiva si se mantiene un aporte adecuado de nutrientes esenciales durante el resto del día, en especial proteínas y grasas saludables. De lo contrario, el cuerpo puede terminar recurriendo a la masa muscular como fuente de energía, una consecuencia contraproducente para la salud metabólica y la composición corporal.
Sánchez incide en que la pérdida de músculo no solo empeora la fuerza y el rendimiento, sino que además disminuye el gasto energético diario, obstaculizando el objetivo de adelgazar a medio plazo. Por ello, recomienda que cualquier plan que contemple cenas ligeras se compense con comidas intermedias más completas, donde se incorporen buenas fuentes de proteína (como carnes magras, pescado, huevos o legumbres) y grasas de calidad procedentes de alimentos como el aceite de oliva, los frutos secos o el aguacate.
El nutricionista también destaca la importancia del entrenamiento de fuerza como complemento indispensable. Sin actividad física, advierte, la restricción calórica por sí sola puede derivar en un metabolismo más lento y una sensación constante de fatiga. La clave, insiste, no está en eliminar comidas, sino en ajustar su contenido y mantener la masa muscular activa mediante ejercicio regular.
En cuanto a las cantidades, Sánchez señala que un déficit calórico moderado, entre 300 y 500 kilocalorías diarias, suele ser suficiente para obtener resultados visibles en el plazo de cuatro a ocho semanas, siempre que se respeten los periodos de mantenimiento para consolidar los avances. Este enfoque progresivo ayuda a evitar el efecto rebote y mejora la calidad muscular y metabólica a largo plazo.
Por último, recuerda que una dieta equilibrada debe incluir una buena cantidad de verduras en las principales comidas del día. Los antioxidantes y vitaminas presentes en frutas y verduras son indispensables para mantener la energía y prevenir el cansancio. En su opinión, el error no está en cenar de forma ligera, sino en convertir esa práctica en una rutina carente de nutrientes.