Tecnología sanitaria

El diagnóstico in vitro anticipa la enfermedad cardiovascular

►Más del 70% de las decisiones clínicas se basan en resultados de laboratorio de Análisis Clínicos

 Personal técnico de laboratorio prepara unas muestras para analizar.
Personal técnico de laboratorio prepara unas muestras para analizar.EFEAgencia EFE

Los datos resultan demoledores. La enfermedad cardiovascular es la primera causa de muerte en el mundo. Y España no se queda atrás, ya que estas patologías provocan cada año la muerte de 120.000 personas. A pesar de ello, hay razones para el optimismo, ya que se estima que el 80% de las muertes prematuras por enfermedad cardiovascular se podrían evitar si se encuentran las estrategias de prevención adecuadas y se controlan los factores de riesgo.

Detectar estas patologías antes de que hagan mella en la salud resulta esencial. Y ese anhelo resulta más sencillo de lo que parece gracias a la tecnología sanitaria, ya que las pruebas de laboratorio son esenciales en la prevención, detección y tratamiento de las enfermedades cardiovasculares.

Así lo ratifica el doctor Alejandro Curcio, jefe de Servicio de Cardiología del Hospital Universitario de Fuenlabrada de Madrid, quien explica que «el laboratorio de Análisis Clínicos apoya en muchos ámbitos la decisión del cardiólogo. Resulta esencial, por ejemplo, para diferenciar insuficiencias cardiacas de origen cardiológico o disneas o fatigas de otro origen, así como en un screening de afectación hepática o renal. Es decir, está presente en todas las fases de la enfermedad, tanto en la preventiva como en el diagnóstico y en el tratamiento».

Entre las herramientas más eficaces a la hora de detectar precozmente enfermedades cardiovasculares tan comunes como la insuficiencia cardiaca, los infartos, o la hipercolesterolemia familiar, destaca el papel que juega el diagnóstico in vitro (DIV), tal y como se demuestra en la entrega del serial «Espía de Laboratorio», un proyecto divulgativo de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria, Fenin, que invita a los ciudadanos a «colarse» en un laboratorio de Análisis Clínicos y conocer las diversas pruebas que se llevan a cabo en estos espacios para el mejor diagnóstico y abordaje de muchas patologías de alta prevalencia en la población.

Aportación esencial

En más del 95% de los casos en los que se solicita una prueba de laboratorio desde Cardiología se incluye glucosa, colesterol, urea o hemoglobina, parámetros todos ellos implicados en las patologías cardiovasculares. «Una parte muy importante de la patología cardiaca frecuente tiene una relación muy directa con el laboratorio. Hablamos de parámetros tan conocidos para la población como son la glucosa, el colesterol, los triglicéridos, los lípidos, así como la urea y la creatinina, ya que las enfermedades renales son causa de enfermedades cardiovasculares y, viceversa. De hecho, gracias a estas pruebas que hoy podemos realizar, somos capaces de detectar y, por tanto, tratar antes los síndromes coronarios agudos o infartos», añade el doctor Santiago Prieto, jefe de Servicio de Laboratorio Clínico del Hospital de Fuenlabrada.

En este escenario, el peso que cobra el diagnóstico in vitro dentro del abordaje de la enfermedad cardiovascular resulta esencial. Y para muestra, un botón, ya que se estima que más del 70% de las decisiones clínicas están basadas en información o resultados procedentes de los laboratorios. En el caso del Hospital de Fuenlabrada, desde hace cinco años cuenta con una consulta específica de cardiopatías familiares. Tal como explica el doctor Curcio, «uno de los pilares para el diagnóstico de estas patologías son los paneles genéticos para saber qué genes están implicados en cada paciente, siendo una herramienta tanto de diagnóstico como de pronóstico. Se toman muchas decisiones terapéuticas muy avanzadas, en función de lo que nos marcan los paneles genéticos, incluso, en personas asintomáticas que no tienen activa la enfermedad en ese momento. En estos casos, se puede decidir, a través de estos marcadores genéticos, implantarles, por ejemplo, un desfibrilador», añade el doctor Curcio.

Revolución tecnológica

El impacto de la tecnología es revolucionario, ya que, según apunta la doctora Cristina Sánchez, miembro del Servicio de Laboratorio Clínico del mismo hospital, «el diagnóstico molecular ha supuesto un avance clave en el proceso de valoración de muchos pacientes en diferentes patologías, gracias a la aparición de nueva tecnología de secuenciación y el desarrollo de la bioinformática, que han favorecido que tengamos estudios más amplios a menor coste y en menor tiempo y que han entrado a formar parte del diagnóstico etiológico de muchas enfermedades».

A pesar de ello, la mayoría de pacientes desconoce esa labor, lo que otorga mayor importancia a este proyecto divulgativo de Fenin para revertirlo. Así lo reconoce Emilio Sotoca, paciente del Hospital de Fuenlabrada, quien sufrió una angina de pecho en 2016 y lleva tres stents, una situación que se complica por su condición de diabético. A pesar de su circunstancia, admite desconocer a fondo la labor que se realiza en el laboratorio de análisis clínicos de un hospital, aunque es consciente de que se trata de un trabajo «fundamental». En su caso, acude de manera frecuente al laboratorio para someterse a pruebas y realizarse análisis y extracciones a petición de los especialistas que le tratan y que necesitan tener información de su estado.

►Ante el desconocimiento real que existe entre la población y los propios pacientes sobre el rol que cumplen las pruebas de laboratorio en el abordaje de las enfermedades cardiovasculares, «el objetivo de la última entrega de ‘‘Espías de laboratorio’’ es transmitir a la población el valor de las tecnologías DIV, el papel que juegan en la detección y abordaje de enfermedades con un gran impacto en la población, pues son un elemento clave del proceso de salud», asegura Carlos Sisternas, coordinador del Sector de Diagnóstico In Vitro de Fenin.