Salud
José Abellán, cardiólogo: ''la gente que vapea tiene un 33% más de posibilidades de sufrir un infarto''
En el Día Mundial del Cáncer de Pulmón, las declaraciones del especialista reavivan el debate sobre la seguridad real de los cigarrillos electrónicos y la necesidad de reforzar las campañas de prevención

Hoy, 17 de noviembre, es el Día Mundial del Cáncer de Pulmón. En el marco de esta fecha señalada, el cardiólogo José Abellán ha lanzado una seria advertencia sobre los riesgos del vapeo. Durante su participación en el podcast The Wild Project, conducido por el youtuber Jordi Wild, el especialista alertó de las consecuencias cardiovasculares y respiratorias asociadas al consumo de cigarrillos electrónicos, una práctica que continúa creciendo entre jóvenes y adultos.
Más riesgo cardíaco y respiratorio
Abellán afirmó que, según los datos que maneja, “la gente que vapea tiene un 33% más de posibilidades de sufrir un infarto”, y que quienes utilizan estos dispositivos presentan el doble de riesgo de desarrollar cáncer de pulmón en comparación con quienes no los emplean.
El cardiólogo explicó que, a diferencia de la percepción generalizada de que el vapeo es inocuo, cada inhalación introduce en los pulmones cientos de sustancias tóxicas, que además pasan a la sangre con mayor rapidez que las derivadas del tabaco convencional. Aunque los vapeadores no generan productos de combustión, muchos contienen nicotina, propilenglicol, metales pesados, benceno, níquel y plomo, compuestos que pueden afectar al sistema cardiovascular y respiratorio.
“Como ponerse delante de un cañón de humo y aspirar”
Para ilustrar el impacto del vapor en el organismo, Abellán recurrió a una metáfora llamativa: comparó el acto de vapear con ponerse delante de los cañones de humo de una discoteca y aspirar con fuerza varias veces al día. “Y encima pagando”, añadió, subrayando lo paradójico de la normalización del vapeo entre los jóvenes.
En el Día Mundial del Cáncer de Pulmón, las declaraciones del especialista reavivan el debate sobre la seguridad real de los cigarrillos electrónicos y la necesidad de reforzar las campañas de prevención. Organizaciones sanitarias recuerdan que, aunque el vapeo se ha promocionado como una alternativa menos dañina que el tabaco, no está exento de riesgos serios y todavía se desconocen los efectos a largo plazo.