Ventajas y desventajas

¿Es malo beber agua durante las comidas? Sanidad resuelve el mito

A pesar de que su consumo es esencial, se puede dudar de cuál es el momento óptimo para su ingesta

Durante el verano es esencial beber mucha agua, porque cuando estamos correctamente hidratados, nuestro cuerpo es capaz de regular mejor su temperatura | Fuente: EFE/ Sergio Pérez
Durante el verano es esencial beber mucha agua, porque cuando estamos correctamente hidratados, nuestro cuerpo es capaz de regular mejor su temperatura | Fuente: EFE/ Sergio PérezSergio PérezAgencia EFE

El Ministerio de Sanidad ha desmentido varios mitos relacionados con los hábitos saludables, y el consumo de agua ha sido uno de ellos. A pesar de ser una bebida que forma parte de la rutina diaria, a menudo se puede dudar de cuál es el momento óptimo para su ingesta. Esto se debe a que el agua es especialmente saciante.

Es fundamental recordar que el cuerpo está compuesto en un 50-70% de agua, lo que hace que su consumo diario sea imprescindible para la vida. A lo largo de los años, se han realizado numerosos estudios que no han logrado determinar la cantidad exacta requerida. No obstante, se ha establecido que una cantidad adecuada oscila entre 1,5 y 2 litros al día.

¿Es cierto que se debe evitar durante las comidas?

Existe la creencia popular de que no es necesario beber tanta agua durante las comidas, ya que muchos de los alimentos que consumimos aportan cierta cantidad de líquido. No obstante, el Ministerio de Sanidad ha desmentido este mito y ha subrayado la importancia de satisfacer la sed durante las comidas, tanto para mantener una hidratación adecuada como para potenciar la percepción de los sabores de los alimentos.

Por lo tanto, el consumo de agua, según el Ministerio, no debe depender de si estamos comiendo o no. Se recomienda ingerir las cantidades establecidas para beneficiar nuestra salud. Es aconsejable consumir esos 1,5 a 2 litros de agua a lo largo del día, ya sea durante las comidas o fuera de ellas, sin preferencia alguna.

Es relevante destacar que el agua no contiene calorías, por lo que no contribuye al aumento de peso, aunque proporciona una sensación de saciedad. Te puede interesar: ¿Y si la planta de tu casa te dijera que el agua no es potable?