Inmunización

Ampliar el horario de vacunación y localizar a los inmunodeprimidos, crucial para mejorar la inmunización

Además de investigar para que haya vacunas, Sanidad tiene pendiente medir los logros que se consiguen con la vacunación y analizar las lagunas

Objetivo pendiente: Medir lo que se consigue con las vacunas
Objetivo pendiente: Medir lo que se consigue con las vacunasFREEPIKFREEPIK

El coste de vacunar se ha duplicado en cuatro años hasta los 1.519 euros por persona por la incorporación de cuatro nuevos «sueros» al calendario. Y todavía así «es mucho más barato que un ingreso por gripe, que cuesta 3.300 euros, o por meningitis, que supera los 9.700», ha recordado el doctor Jaime Pérez, presidente de la Asociación Española de Vacunología (AEV) con motivo del Congreso Virtual en Vacunas, «El poder de la inmunización», organizado por MSD y que se celebra entre hoy y el domingo.

Siempre la prevención es más eficiente. Pero es necesario dar visibilidad a lo que consiguen: reducir contagios, ingresos, mortalidad y la congestión del SNS. Por eso, hoy, además de «investigar para que haya vacunas, especialmente contra enfermedades respiratorias, uno de los retos es cuantificar los logros que se consiguen con la vacunación», ha incidido.

Coincide con él la doctora Pilar Arrazola, jefe del Servicio de Medicina Preventiva del Hospital 12 de Octubre, de Madrid, que ha explicado que «los programas de vacunación no solo hay que diseñarlos, sino evaluar su impacto». Y para ello «es necesario dotar de recursos y cerrar el círculo de la vacunación demostrando cómo de efectiva es midiendo sus repercusiones».

En este sentido, la doctora ha precisado que es fundamental «ver qué lagunas tenemos y dónde hay que centrar nuestros esfuerzos».

Así, tras recordar que tenemos una alta cobertura vacunal infantil, ha manifestado que «en adultos no se consigue. De modo que el problema no sería la falta de confianza en vacunas, ya que los adultos llevan a los niños a vacunar».

Para la doctora, «hay que tener registros de vacunación, saber a qué edades llegamos menos y qué factores sociales pueden determinar el acceso de vacunación, ver dónde viven estas personas, en qué trabajan, porque eso puede condicionar si uno se vacuna».

En este sentido, «hay que pensar que el adulto tanto si es sano como si tiene una enfermedad de base puede ser paciente pero no tener toda la paciencia del mundo. De modo que hay que trabajar para compatibilizar el horario laboral con el horario en el que les ofrecemos las vacunas».

«Con la vacuna covid fue 24 horas. A lo mejor no hace falta llegar a eso, pero sí es necesario no ser tan rígidos. Y que entre el adulto por donde entre se le dé información sobre las vacunas que ha de ponerse y administrárselas. No puede ser que se recomienden un día y se les cite para otro», ha destacado.

Además, la doctora Arrazola ha recordado que «aquí no se vacuna en las farmacias, pero en otros países sí se hace. También se podría fomentar que (los farmacéuticos) recuerden a los que les toca vacunarse».

A continuación, la doctora María Fernández-Prada, del Servicio de Medicina Preventiva y Salud Pública del Hospital Vital Álvarez Buylla de Mieres, ha puesto el foco en que «no puede ser que no tengamos exactamente identificados para la vigilancia de vacunación a los pacientes de riesgo con inmunodepresión».

«Hoy tenemos sistemas de información insuficientes y locales», ha denunciado tras hablar de la necesidad de la «colaboración del sistema público-privado».

Por su parte, el doctor Jesús de la Fuente, coordinador de la Unidad de Patología TGI-VPH del Hospital Universitario Leonor Vallecas-Madrid y vicepresidente de la Asociación HPV Madrid, ha manifestado que el “Virus del Papiloma Humano (VPH) es cosa de todas y de todos”.

“Los pediatras tienen un papel fundamental en su prevención. No podemos tardar otros diez años en conseguir datos buenos en vacunación frente al VPH en niños al igual que sucedió en niñas”, ha incidido.

También ha destacado la importancia de incluir a mujeres adultas.

Y urge, porque la vacunación frente al VPH “protege frente al cáncer de cérvix y también previene para otros cinco tipos de cáncer para los cuales no hay cribado: vagina, bulba, año, pene, orofaringe. Para ellos, la única prevención es la vacunación”, ha incidido.

Por último, el doctor Federico Martinón, jefe del Servicio de Pediatría del Hospital Clínico Universitario de Santiago, ha abordado la importancia de la Inteligencia Artificial. Así, tras recordar que “la investigación es una herramienta necesaria que hay que utilizar de forma recurrente, no solo cuando se necesita de forma urgente”, Martinón ha explicado que la “IA nos va a ayudar a acortar los tiempos entre que se produce un problema y se encuentra la solución a este problema”.

Además, “también puede ser útil para informar de forma fiable a la población”.