Cirugía

La técnica que corrige las perforaciones del tímpano sin dañar el hueso

La timpanoplastia endoscópica es una cirugía reconstructiva ambulatoria del oído medio

Perforaciones del tímpano sin dañar el hueso, este tipo de cirugía es poco invasiva y requiere de menor anestesia
Perforaciones del tímpano sin dañar el hueso, este tipo de cirugía es poco invasiva y requiere de menor anestesiaDREAMSTIMEDREAMSTIME

No oír bien hace que muchas personas se aíslen socialmente. La pérdida de la audición puede ocurrir cuando alguna de las partes del sistema auditivo no funciona de la manera normal.

En el caso del oído medio, se trataría de perforaciones del tímpano, la erosión del martillo, yunque o estribo (es decir, de los huesos que conforman el oído medio) o el desarrollo de enfermedades como, por ejemplo, el colesteatoma, un tejido epitelial que crece invadiendo las cavidades del oído causando sordera.

Pero todos estos casos pueden tratarse. Es decir, desde «los pacientes que acuden por inflamaciones del oído, las llamadas otitis, con o sin salida de pus a través de perforaciones timpánicas, a otros que presentan alteraciones del oído por falta de movilidad de los huesecillos del oído, perforaciones por traumatismos o enfermedades crónicas como el colesteatoma», detalla la doctora Mar Lasso de la Vega, del servicio de Otorrinolaringología del Medical Center de Olympia Quirónsalud.

Todas estas enfermedades de oído medio –prosigue– causan sordera y la «mayoría de ellas pueden curarse mediante su cierre».

Ellos utilizan la timpanoplastia endoscópica. Se trata de una cirugía reconstructiva ambulatoria del oído medio que, a diferencia de la técnica tradicional, es capaz de corregir estos problemas sin necesidad de destruir el hueso sano mastoideo. Para ello, se utiliza un abordaje quirúrgico por el conducto auditivo externo.

La técnica consiste, tal y como explica la doctora, en el uso de un endoscopio de oído que permite una amplia visualización de toda la anatomía del oído medio, y una mejor recuperación postoperatoria, sin necesidad de vendajes.

«Introducimos el endoscopio en el conducto auditivo y, con una pequeña incisión, podemos cerrar perforaciones, grandes o pequeñas, de diferentes localizaciones, así como introducirnos en el oído medio, ver las posibles causas de la sordera y mediante unos injertos o prótesis de oído medio conseguir mejorar la audición», detalla la doctora Lasso de la Vega.

Una vez cerrado el oído, la audición, según la experta, «mejora y lo protegemos de entradas de agua y de infecciones». Así se consigue un oído sano por mucho tiempo, se controlan las posibles pérdidas de audición y «se retrasa el inicio del uso de audífonos».

«Podemos realizar esta novedosa técnica en pacientes de cualquier edad. Es poco invasiva, precisa menos tiempo de anestesia y es de carácter ambulatorio», destaca la doctora.

Algo clave, ya que las enfermedades del oído medio citadas «las encontramos en todas las edades», afirma la especialista.

En el caso de las personas a partir de los 60 años acuden más frecuentemente a consulta por una sordera debida a un deterioro auditivo, «pero también tenemos pacientes mayores que presentan los oídos perforados con supuraciones crónicas de larga evolución. Estos pacientes tienen una sordera consecuencia de la edad, a la que se suma la sordera por la enfermedad del oído medio», incide.

En el caso de las personas jóvenes que presentan perforaciones timpánicas, generalmente son pacientes que desde niños, tal y como explica la doctora, han tenido problemas de oído medio (otitis) «y no han mejorado con la edad, y las sucesivas supuraciones les han provocado una mayor sordera».

Menos frecuentes son los jóvenes con perforaciones timpánicas causadas por traumatismos en el tímpano que, si no se cierran, dan lugar a sordera progresiva, incide la doctora.

Sea el caso que sea, es importante saber que cualquier problema en alguna de las estructuras del oído medio puede reducir la capacidad auditiva del paciente por lo que la doctora Lasso de la Vega recomienda operar para mejorar la audición para evitar así el uso de audífonos en personas que no lo necesiten.

Algo clave, ya que se estima que la pérdida de capacidad auditiva afecta aproximadamente a 4,6 millones de españoles, pero solo cuatro de cada diez personas que necesitan audífonos los utilizan, según el «Estudio Eurotrack 2023». En Estados Unidos la situación es peor si cabe, ya que solo uno de cada 10 afectados se lo ponen. Es decir, que a priori es importante saber qué pacientes no son operables y son candidatos a audífonos. Estos, independientemente de su coste, precisan de una buena adaptación y, por lo tanto, se deben aconsejar cuando no hay otra alternativa.

El cuidado de la audición es crucial. En la actualidad, más del 5% de la población mundial sufre una pérdida de audición discapacitante. Y en el caso de los mayores de 60 años más del 65% experimenta cierta pérdida auditiva, siendo de grado moderado o alto en casi el 25% de este grupo de edad, según el informe «World Reporte On Hearing» de la Organización Mundial de la Salud (OMS).