Religión

Nueva política para inversiones financieras éticas en el Vaticano

Esta iniciativa, que se enmarca en la política de transparencia impulsada por el Papa Francisco, se pondrá en marcha el próximo 1 de septiembre

El Papa Francisco en la oración del Ángelus el pasado domingo en la plaza de San Pedro del Vaticano
El Papa Francisco en la oración del Ángelus el pasado domingo en la plaza de San Pedro del VaticanoAndrew MedichiniAgencia AP

La Santa Sede pondrá en marcha, a partir del próximo 1 de septiembre, «una nueva política unitaria» para las inversiones financieras, con la intención de garantizar su naturaleza ética, según anunció ayer el Vaticano, una medida que se enmarca en la política de transparencia impulsada por el Papa Francisco.

El Pontífice ya instituyó en junio pasado un Comité para las Inversiones, un organismo incluido en su Constitución Apostólica y dirigido a «garantizar la naturaleza ética de las inversiones inmobiliarias de la Santa Sede», que contrasta con las irregularidades financieras por la compraventa de un edificio de lujo en Londres que actualmente se juzgan en el Vaticano, informa Efe.

«La nueva política de inversiones tiene por objeto garantizar que las inversiones se destinen a contribuir a un mundo más justo y sostenible», así como «proteger el valor real del patrimonio de la Santa Sede generando un rendimiento suficiente para contribuir de forma sostenible a la financiación de sus actividades», indicó el Vaticano en un comunicado. Además, deben estar «en consonancia con las enseñanzas de la Iglesia católica, con exclusiones de las inversiones financieras que contradicen sus principios fundamentales, como la inviolabilidad de la vida o la dignidad del ser humano o el bien común».

Las nuevas directrices de inversión están incluidas en un documento debatido en el Consejo de Economía y especialistas en la materia, bajo la supervisión de los responsables de los Dicasterios (ministerios) de la Curia y de las instituciones y entidades vinculadas a la Santa Sede por el Prefecto de la Secretaría de Economía, Juan Antonio Guerrero Alves.

La nueva política de inversiones se experimentará durante cinco años y entrará en vigor el 1 de septiembre, con un periodo de moratoria para adaptarse a los criterios propuestos. Las instituciones curiales deberán confiar sus inversiones financieras a la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica (APSA), el organismo vaticano encargado de la gestión de su patrimonio económico.