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Verano

Cómo combatir el insomnio en verano

Con pequeños cambios en el entorno y en los hábitos diarios, es posible combatir el insomnio estival y disfrutar de un verano más saludable y reparador

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Con la llegada del verano, muchas personas experimentan dificultades para dormir. Las altas temperaturas nocturnas, el aumento de la luz solar y las alteraciones en los horarios pueden provocar insomnio, afectando la calidad de vida y el rendimiento diario. Sin embargo, existen estrategias efectivas para mejorar el descanso durante los meses más calurosos del año.

El calor, el principal enemigo del sueño

Diversos estudios señalan que la temperatura ideal para dormir oscila entre los 18 y 22 grados Celsius. Durante el verano, especialmente en zonas donde las noches son tropicales (más de 20 ºC), el cuerpo tiene más dificultad para alcanzar la temperatura adecuada para conciliar el sueño profundo.

Consejos para dormir mejor en verano

  • Mantén el dormitorio fresco: Usa ventiladores, aire acondicionado moderado o coloca sábanas húmedas frente a una corriente de aire para refrescar el ambiente. También es recomendable cerrar persianas o cortinas durante el día para evitar que la habitación se caliente en exceso.
  • Cambia la ropa de cama: Opta por tejidos ligeros y transpirables como el algodón o el lino. Evita mantas gruesas o pijamas que retengan calor.
  • Ducha templada antes de dormir: Una ducha con agua tibia (no fría) ayuda a reducir la temperatura corporal de manera gradual, preparando al cuerpo para el descanso.
  • Evita las cenas pesadas y el alcohol: Comer ligero por la noche y reducir el consumo de bebidas alcohólicas puede mejorar la calidad del sueño. El alcohol, aunque al principio da somnolencia, interfiere con las fases profundas del sueño.
  • Mantén una rutina estable: A pesar de las vacaciones, conviene respetar horarios regulares de sueño y vigilia para no alterar el reloj biológico.

Importancia del descanso

Dormir mal de forma prolongada puede provocar irritabilidad, falta de concentración, disminución del sistema inmunológico e incluso trastornos del ánimo. Por eso, los expertos recomiendan prestar atención a la higiene del sueño especialmente en épocas en las que factores externos, como el clima, lo dificultan.