Burgos

Continúan ingresados dos de los cinco heridos en el incendio de Burgos

Dos de las cinco personas heridas en el incendio que ha costado la vida a otros seis miembros de la misma familia en el incendio de una casa rural en Tordómar (Burgos) continúan ingresadas en el hospital de la capital burgalesa.

Los heridos que siguen ingresados son dos adultos que han sufrido quemaduras, según ha señalado a Efe el consejero de Presidencia del Gobierno asturiano, Guillermo Martínez, que esta mañana se desplazó a Burgos para acompañar a los miembros de la familia, originaria de Gijón aunque una parte residía en Madrid.

Martínez ha puesto a disposición de la familia todos los medios del Principado ante la tragedia que han sufrido y ha abogado por ser "muy respetuosos"dada la dramática situación que están viviendo a la vez que ha agradecido el "excepcional"comportamiento de la Junta de Castilla y León y de los vecinos del pueblo de Tordómar.

Según el consejero asturiano, la actuación de las personas que acudieron en un primer momento a la casa rural después de declararse el incendio fue "fundamental"para que no hubiera más víctimas.

A la espera de la decisión que tome la familia sobre el traslado de los cadáveres, Martínez asistirá mañana, junto a algún familiar de los fallecidos, al oficio religioso que se celebrará a las 12:30 en la localidad de Tordómar como homenaje a las víctimas "en señal de agradecimiento a los vecinos".

Los seis fallecidos en el incendio han sido la abuela de la familia, dos de sus hijas y tres de sus nietos que se habían desplazado a Burgos para celebrar el cumpleaños de María José Medio Bozmedia, de 59 años, que trabajaba como enfermera en un centro de salud del barrio gijonés de La Calzada.

Una parte de la familia reside en Deva, en los alrededores de Gijón, donde los hermanos de María José Medio Bozmedia regentan el establecimiento de turismo rural "La Ermita de Deva", mientras que su hija, María, de 36 años, también fallecida, ejercía como profesora y vivía en Villaviciosa junto a sus dos hijos, Santiago y Carmen, también víctimas del incendio en el que su padre ha resultado herido.

Tanto Gijón como Villaviciosa han decretado tres días de luto por los seis muertos tras sufrir una intoxicación por inhalación de humo tóxico que, según las primeras estimaciones, pudo deberse a la chispa de una chimenea que provocó la combustión de un sofá.