Investigación

Descubren el gen clave para desarrollar "la píldora" masculina

Su inactivación podría ser la vía definitiva para desarrollar un fármaco anticonceptivo no hormonal y reversible, tanto para varones como para machos de especies animales

Dos píldoras anticonceptivas masculinas reducen eficazmente la testosterona y sin causar importantes efectos secundarios
Los intentos pasados de desarrollar un anticonceptivo másculino no han prosperadodiego cervo©Gtresonline

En la reproducción sexual, los espermatozoides aportan la mitad del material genómico necesario para procreación, pero, hasta ahora, no se habían definido los mecanismos moleculares clave para su formación. Investigadores de la Universidad Estatal de Washington (Estados Unidos) han identificado una posible nueva diana genética para desarrollar un anticonceptivo masculino, uno de los fármacos que más esta costando conseguir en la Historia de la ciencia, por la complejidad de dar con una molécula que aune eficacia y seguridad.

Su hallazgo es el mecanismo de un gen, llamado Arrdc5, que es específico de los testículos masculinos- no se encuentra en ninguna otra parte del cuerpo- y que funciona igual en muchas especies de mamíferos. En su trabajo, cuyos resultados han publicado en la revista científica Nature Communications, los científicos anularon el gen en ratones, lo que produjo infertilidad sólo en los machos, lo que afectó a su recuento, movimiento y forma de los espermatozoides."Cuando este gen se inactiva o inhibe en los machos, éstos producen espermatozoides que no pueden fertilizar un óvulo, y ése es un objetivo primordial para el desarrollo de anticonceptivos masculinos", ha añadido Jon Oatley, autor principal del trabajo.

De hecho, la carencia de este gen provoca la causa más común de infertilidad masculina: la enfermedad denominada oligoastenoteratospermia u OAT. En esta afección se produce una disminución de la cantidad de espermatozoides producidos y una movilidad más lenta y una forma distorsionada de los mismos, de modo que son incapaces de fusionarse con un óvulo.

En el estudio, los ratones macho que carecían de este gen producían un 28% menos de espermatozoides, se movían 2,8 veces más despacio que en los ratones normales y, cerca del 98% de sus espermatozoides, presentaban cabezas y piezas medias anormales.

El trabajo señaló también qué la proteína que codifica este gen es necesaria para la producción normal de esperma. Por ello, el siguiente paso para el equipo de Oatley será trabajar en el diseño de un fármaco que inhiba la función de esa proteína. La alteración de esta proteína no requeriría ninguna interferencia hormonal,un obstáculo clave en la anticoncepción masculina, ya que la testosterona desempeña otras funciones además de la producción de esperma en los hombres -como la formación de masa ósea y fuerza muscular- así como la producción de glóbulos rojos. También facilitaría su reversibilidad como anticonceptivo. "No se trata de eliminar la capacidad de producir espermatozoides, sino de impedir que los que se producen lo hagan correctamente. Entonces, en teoría, se podría retirar el fármaco y los espermatozoides empezarían a fabricarse de nuevo con normalidad", explico el autor.

"Desarrollar una forma de frenar el crecimiento de la población y detener los embarazos no deseados es realmente importante para el futuro de la raza humana. Ahora mismo, no tenemos nada en el lado masculino para la anticoncepción, aparte de la cirugía, y sólo un pequeño porcentaje de hombres opta por la vasectomía. Si podemos convertir este descubrimiento en una solución anticonceptiva, podría tener repercusiones de gran alcance", ha remachado Oatley.