El movimiento estudiantil se desinfla y apenas reúne a unos cientos de personas en Madrid

Una manifestación ha puesto fin a los tres días de huelga convocados por el Sindicato de Estudiantes y apoyado por Comisiones Obreras y UGT. La hora prevista de por los organizadores eran las 18:30 horas, pero la plaza de Neptuno, donde arrancaba, apenas contaba con un varias centenas a la hora señalada. "Tenemos que esperar un poco porque esperamos que vengan decenas de miles de personas", señalaba Tohil Delgado, secretario general del Sindicato y uno de los que encabezaban la manifestación. Le acompañaba el presidente de la asociación de padres FAPA Giner de los Ríos, José Luis Pazos, y miembros de otros sindicatos estudiantiles como Stem y Demanda Joven. "No a la contrarreforma educativa", dictaba una de las cabecera. La coordinadora de los trabajadores llevaban su propia pancarta: "Servicios públicos y empleo, sí. Fuera el Gobierno de los recortes y de la corrupción, el dinero lo tienen los banqueros". Todas estas reivindicaciones otorgaban a la manifestación un cariz más social e ideológico que educativo.

De acuerdo con Delgado, el 90 % de los centros públicos de España siguieron la convocatoria de huelga, aunque el Ministerio afirma que no supera el 15 por ciento. "Somos más de 40.000", sugería el secretario de los estudiantes poco después de terminar la concentración, a las puertas del Ministerio de Educación. No obstante, el grupo de manifestantes no llegaba al final de la calle. "Muchos deben estar esperándonos en Sol", se defendía el representante estudiantil. Según fuentes de la Policía Municipal de Madrid, el número de manifestantes no pasaba de 1.500.

A lo largo de la manifestación se sucedieron las declaraciones de los representantes de cada uno de los grupos: UGT, CC OO y miembros del sector público madrileño. A pesar del fracaso de la convocatoria, José Luis Pazos insistía: "Esto es un éxito de la comunidad educativa"y felicitaba a los asistentes. La marea verde que se esperaba no fue capaz de convocar a un gran número de personas. Eso sí, Tohil Delgado no dejó de insistir: "No nos van a parar porque no vamos a aceptar la reforma de Wert".

Escasa participación también en Barcelona

La manifestación de Barcelona tampoco tuvo mucho más éxito. De hecho, no ha sido tal y, debido a la escasa participación, se ha convertido en concentración-asamblea en Barcelona.

Si algo se ha demostrado con las últimas convocatorias de manifestaciones en dos días consecutivos -ayer y hoy- es que el sector de la educación comienza a acusar agotamiento en la lucha contra los recortes y que el intenso frío que se aprecia hoy en Barcelona también ha tenido un efecto disuasorio.

Mientras varios miles de estudiantes -unos 5.000, según AJEC- se manifestaron ayer por la mañana en Barcelona, hoy, apenas se han reunido unas 200 personas en la plaza Universitat, entre docentes, estudiantes y padres de alumnos.

La escasa participación de docentes puede estar relacionada también con el hecho que ayer mismo la consellera de Enseñanza, Irene Rigau, anunció en el Parlament que impulsará una flexibilización del sistema de sustituciones de docentes de baja que, hasta ahora, se realizaban a los diez días, en aplicación de un real decreto del Gobierno del PP.