Pensiones

El 64,8% rechaza pagar más a cambio de bienestar

Uno de cada dos reconoce que estamos peor que la media y con falta de prestaciones pero sólo el 28,7 aceptaría más impuestos.

La baja natalidad y el envejecimiento de la población en España podría suponer un grave problema para el Estado del Bienestar
La baja natalidad y el envejecimiento de la población en España podría suponer un grave problema para el Estado del Bienestarlarazon

Uno de cada dos reconoce que estamos peor que la media y con falta de prestaciones pero sólo el 28,7 aceptaría más impuestos.

El Estado del Bienestar es aquel que incluye las intervenciones destinadas a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. Estas acciones en las que el Estado toma parte son los servicios públicos como la Sanidad, la Educación, las prestaciones a las familias o la vivienda social. Otras son las intervenciones normativas, que están encaminadas a proteger al ciudadano cuando éste adopta la figura de un trabajador, un consumidor o un residente. Y, por último, las mediaciones públicas, destinadas a generar puestos de trabajo de calidad. Todas ellas forman algunos de los ámbitos principales que más preocupan a los ciudadanos, ya que esto supone que existan los colegios públicos, que haya acceso al trabajo y a la vivienda o que el Estado pueda garantizar las pensiones de jubilación. Para que los ciudadanos puedan disfrutar de todas estas ventajas, los españoles contribuyen al Estado con sus impuestos. Pero, ¿son suficientes?

Durante los setenta, se llevaron a cabo avances que desembocaron en una profunda mejora del Estado de Bienestar. Esto podría explicar que el 58,4% de los encuestados crea que este modelo social es un logro de la democracia, pese a que un 55,4% piensa que en España no disfrutamos de las prestaciones suficientes. Sin embargo resulta curioso que, aunque los españoles piensan que nuestro Estado del Bienestar no está dotado de los servicios que debería, un 64,8% no estaría dispuesto a pagar más impuestos para mejorarlo, siendo los mayores de 55 años quienes se niegan a pagar más para que el Estado social mejore.